En un plenario tan fragmentado como el de Rubí, con hasta ocho formaciones políticas, y en el que el PSC ha gobernado los últimos cuatro años con minoría junto al concejal no adscrito Sergi Garcia (exCiU) -lo que supone un ejecutivo de siete concejales de 25 posibles-, los resultados de las elecciones del domingo se presumen muy inciertos. Además de la salida de Garcia de la antigua CiU para incorporarse al equipo de gobierno, dejando a su formación con un único regidor, a lo largo del mandato se han producido otras ‘fugas’: la de los exconcejales del PP Jonatan Cobo y Noelia Borque, que fueron expulsados del partido y lo dejaron sin representación municipal al no abandonar sus actas y continuar como concejales no adscritos, y la de los exediles de Cs José Manuel Mateo y María Dolores Marín, que siguieron el mismo camino y debilitaron a su formación al dejarla con solo dos concejales.
Relevo
Con este escenario de fondo, el domingo se presentan a los comicios los ocho grupos con representación municipal y dos más que concurren por primera vez en la ciudad; el partido de ultraderecha Vox, con Vanessa Garrido como cabeza de lista, y Rubí Republicana, con Lluís Roset como alcaldable, una candidatura independentista articulada en torno al movimiento Primàries Catalunya.
Los partidos con presencia en el plenario que se presentan son el PSC (seis concejales), ERC (cinco), Alternativa d’Unitat Popular (AUP), con tres; Ciutadans (dos); Junts per Rubí (PDeCAT), con uno, y Veïns per Rubí (VR), también con uno. ICV, con dos ediles, también concurre, pero lo hace en coalición con Podem bajo la candidatura de En Comú Podem Rubí, que en realidad es la primera vez que se presenta en la localidad.
La alcaldesa, la socialista Ana María Martínez, se presenta a la reelección tras ganar en 2015 los primeros comicios a los que concurría (en sustitución de la exalcadesa Carmen García). La primera edil, concejal socialista desde 2003, aspira a repetir como fuerza más votada e incluso a mejorar los resultados de las municipales de 2015, cuando el PSC perdió dos ediles.
ERC estrena como candidato a Xavier Corbera, actual portavoz del grupo municipal. Los republicanos, segunda fuerza política más votada en 2015 y principal partido de la oposición, se marcan como objetivo liderar el relevo del PSC en el gobierno municipal, donde los socialistas llevan instalados desde hace 16 años (el último mandato con Martínez como alcaldesa y los tres anteriores con Carme García).
También estrena candidato Cs, con Roberto Martín, exjefe de gabinete de la alcaldesa. La formación quiere repetir los buenos resultados con los que en las municipales de 2015 entró por primera vez en el plenario con cuatro concejales (aunque por el camino dos de ellos hayan abandonado el grupo para convertirse en ediles no adscritos).
AUP también renueva candidata, con Betlem Cañizar como cabeza de lista. La formación sigue apostando por un proyecto municipalista y asambleario. Dos de sus tres ediles actuales cierran la lista y el tercero va de número cinco.
Expulsión
En Comú Podem Rubí es la primera vez que se presenta como tal en la ciudad. La coalición entre Podem e ICV (con dos concejales) está liderada por la actual concejal ecosocialista Ànnia Garcia.
Junts per Rubí, la marca con la que el PDeCAT (exConvergència) se presenta a los comicios, está liderado por Jaume Buscallà, que en la legislatura 2011-2015 fue concejal del equipo de gobierno del PSC (dejó el partido en febrero de 2015). Del actual portavoz del grupo municipal de CiU (aún mantiene las siglas), Víctor Puig, no hay ni rastro en la candidatura de Junts per Rubí.
El PP encara las municipales con nuevo alcaldable, Juan José Giner, tras un mandato para olvidar, en el que acabó expulsado a sus dos concejales, mientras que VR repite con su actual y único regidor Antoni García como cabeza de lista. El objetivo de la formación pasa por mantener su representación municipal después de entrar por primera vez en el plenario en las pasadas elecciones de 2015.