Tras el agua, le llega el turno al autobús urbano. O al menos esa es la voluntad del nuevo bipartito (TxT y ERC), que tras su primera reunión de gobierno, ayer por la mañana, anunció que quieren valorar en profundidad la gestión directa de la red de autobuses urbanos. La apuesta política del nuevo Ejecutivo local está "clara", señaló el primer edil, Jordi Ballart, tras la junta de gobierno: "Sabemos el modelo que queremos. Defendemos la gestión directa, pero no somos unos inconscientes y queremos cubrirnos las espaldas", señaló convencido.
El equipo de gobierno ha decidido parar el proceso iniciado en el mandato pasado, cuando se acordó externalizar el servicio, para "analizar en profundidad" la viabilidad de la gestión directa. El bipartito lo llama una "parada política" porque administrativamente no tienen que parar el expediente de licitación ya que los pliegos que regulaban el concurso aún no están aprobados. Se limitarán a no elevarlo al pleno y, en paralelo, iniciar este análisis técnico y económico sobre la repercusión de municipalizar la gestión de los autobuses, en manos ahora de Tmesa (empresa mixta participada al 80% por Avanza y al 20% por el Ayuntamiento).
Ballart explicó que tienen "indicios" de la viabilidad de la municipalización. Considera que este modelo "puede ser eficiente y eficaz" y "no tiene por qué generar más coste" que la concesión, pero un examen a fondo acabará de definir la apuesta del bipartito para "no pillarnos los dedos". Este proceso de análisis, dijo, no debe durar más de medio año. De esta forma, a inicios de 2020 el escenario estaría claro y se pondrían en marcha los pasos para la municipalización.
Policías de barrio
El asunto del autobús no es el único que pasó ayer por la junta de gobierno. Los ediles definieron otras tantas acciones que van a poner en marcha en los próximos días y semanas. Una de ellas es la creación de la concejalía de las rieras, que dirigirá Jennifer Ramírez. Ballart anunció que quieren crear un plan global de actuación en los cauces fluviales "a corto, medio y largo plazo" para transformar estos espacios y acabar con el efecto barrera que produce en los barrios por los que circulan.
Otras de las prioridades será la creación del policía de barrio. El bipartito quiere potenciar "la seguridad de proximidad". Aseguró ayer Ballart que "la gente reclama al policía de barrio, que pasea a pie y entra en las tiendas". Esta figura se podrá crear en septiembre, anunció, con la incorporación de 15 nuevos policías municipales.
El futuro de Eco-equip también se examinará con lupa. El gobierno iniciará una revisión interna del servicio de limpieza y recogida de residuos para un "imprescindible proceso de mejora", indicó el primer edil, quien admitió que "la ciudad debería estar más limpia de lo que está". Poco más quiso avanzar sobre este asunto, pero sí dijo que hay muchos sistemas de recogida de basura posibles y que no en toda la ciudad debe aplicarse el mismo.
Otra de las cuestiones que pasaron ayer por la reunión del gobierno fue el actual presupuesto, elaborado por el anterior equipo de gobierno socialista. El bipartito analizará las actuales cuentas porque cree que "puede haber cierto margen de maniobra para reprogramar ciertas líneas de actuación y liberar gastos" que vayan a cubrir algunas de las nuevas prioridades.
¿Demasiados distritos?
La estructura territorial también se someterá a revisión. El bipartito cree que "hay que abrir un proceso de reflexión sobre la actual organización territorial, que se dibujó en los años 80".
Dada la "complejidad" del asunto, el proceso contará con la ayuda de expertos y participará la sociedad civil. Ballart considera que el actual modelo, con 34 barrios y 7 distritos, "quizás no es sostenible". Este proceso también debe servir para abordar una "descentralización futura" de los servicios y crear ayuntamientos de distrito.
La primera reclamación del nuevo Ejecutivo será para el president de la Generalitat, Quim Torra. Esperan reunirse con él para que Terrassa pase a estar incluida en la zona 2 del sistema tarifario integrado y acabar así con el "agravio" que supone que actualmente esté ubicada en la zona 3.
El bipartito asegura que empezará a redactar el plan de mandato con la idea de que esté listo a mediados de septiembre. Para entonces, el 26 de ese mismo mes, el nuevo Ejecutivo quiere hacer el primer balance de este gobierno de coalición ya que se cumplirán 100 días desde su formación.
Los líderes de TxT y ERC-MES exhibieron sintonía "personal y política", tras la primera junta de gobierno. Ballart aseguró que aunque formado por dos partidos, el gobierno de la ciudad "es uno solo" y que "desde el minuto cero ha habido confianza y lealtad". El de Terrassa es un "gobierno ilusionado, responsable y unido". El primer teniente de alcalde y líder de ERC, Isaac Albert, aseguró que tratarán de hacerse "merecedores" de "las ilusiones y las expectativas de cambio" que se han generado en la ciudad. Muy importante será, dijo, "construir un relato que dé sentido político a la acción de gobierno y defina hacia dónde va la ciudad".
La medida
El nuevo equipo de gobierno examinará la viabilidad económica y técnica de asumir la gestión de la red de transporte urbano, convencido de que hay "indicios" que avalan su apuesta política
Prioridades
El bipartito someterá a revisión la estructura territorial de la ciudad, creará la figura de los policías de barrio, analizará a fondo el servicio de limpieza y reprogramará algunos gastos del presupuesto.