El pleno celebró ayer una sesión extraordinaria e "imprevista", como reconoció el alcalde Alfredo Vega, para aprobar las actas de las últimas juntas y comisiones y se convirtió en un ameno encuentro de despedida. Catorce de los 27 concejales no repetirán el próximo mandato y la sesión, que se saldó en pocos minutos y por asentimiento, permitió a los políticos comentar los resultados electorales. También especular sobre el cambio de gobierno que se avecina, después de que Tot per Terrassa ganara las elecciones del 26M y presente hoy el pacto de gobierno con ERC-MES.
Superado el sofocón electoral, que ha apartado del poder al PSC y ha dejado fuera del pleno a los seis concejales de TEC, al PP y a la CUP, el encuentro de ayer fue de lo más distendido. Lejos de la tensión política del mandato, todo fueron risas, bromas y muestras de afecto.
El aún alcalde Alfredo Vega (PSC) fue el centro de la mayoría de los corrillos políticos. El más curioso, el que formaron concejales de ERC, MES, TeC, la CUP y el PSC en la bancada de la oposición. Todos en torno a Vega, que se permitió bromear sobre su futuro papel en la oposición: "Haré de Marc Medina (CUP). Seré el antisistema y el antipatriarcado", bromeó sentado en el sillón del concejal anticapitalista.
El republicano Isaac Albert fue el hombre más buscado. En sus manos está el pacto de gobierno y el nuevo cartapacio.
Pero quien más disfrutó en la última sesión plenaria fue, sin duda, el portavoz del PP. Mientras los concejales se despedían, Álex Rodríguez saludaba por twiter desde una playa de Ibiza. "Últimos estertores del postureo antes de la desconexión", comentaba el concejal popular, una de las catorce bajas del 26M. Marta Giménez, nueva presidenta del PP, explicó que el viaje "lo tenía previsto hace tiempo, cuando el pleno no estaba señalado".