Can Boada del Pi estaba de fiesta mayor el fin de semana. El sábado por la noche, un episodio violento sacudió al barrio: un hombre apuñaló a dos menores, al parecer tras una discusión previa. Los Mossos d’Esquadra detuvieron al agresor, que está acusado de intentar matar a las víctimas con un arma blanca que no fue recuperada. Los menores acuchillados recibieron asistencia, pero no se teme por su vida.
Los Mossos d’Esquadra investigan el hecho sangriento, que se desató alrededor de las 11.30 de la noche en la avenida de Can Boada del Pi, en los aledaños de un bar.
Había bastante gente en el sector, que celebraba la fiesta mayor del barrio. Y un coche circulaba por la zona. Según la información manejada por la policía, el conductor del vehículo quería entrar donde, al parecer, no podía entrar, por la aglomeración. Hubo sus más y sus menos, recriminaciones altas, y el conductor se marchó con el ánimo acalorado. A los pocos minutos regresó al sitio. Iba armado de un cuchillo y un martillo.
Retenido por testigos
La alarma cundió. Se vieron escaramuzas y carreras, un ataque con el arma, un chico con un corte en el pecho, otro con heridas en brazos, y el agresor que echa a correr. Muchos testigos observaron la agresión y el sospechoso no consiguió huir. Lo retuvieron entre varios, y se llevó algún golpe. Llegaron mossos d’esquadra, que detuvieron al atacante y encontraron el martillo, no así el arma blanca. Le dio tiempo a desprenderse de ella.
Los heridos tienen 15 y 17 años, respectivamente. El detenido, 41. Es español y vecino de Terrassa, y carecía de antecedentes. Ahora está imputado de homicidio en grado de tentativa y lesiones.