El terrassense Josep Rull tomó ayer posesión de su escaño durante la constitución del Congreso de la XIII legislatura utilizando la misma fórmula que los otros dos diputados de Junts per Catalunya también encarcelados por el procés, Jordi Turull y Jordi Sànchez. Los tres prometieron su cargo en la Cámara Baja diciendo en catalán: "Per imperatiu legal i per la lleialtat al mandat democràtic de l’1 d’octubre i al poble de Catalunya". Por su lado, el diputado preso de ERC Oriol Junqueras tomó posesión de su escaño prometinendo su cargo "pel compromís republicà i com a pres polític". "Per imperatiu legal, sí prometo", concluyó Junqueras también en catalán.
Para impedir que se les escuchara, los diputados de Vox estuvieron golpeado la bancada cada vez que uno de ellos u otro parlamentario independentista acataba la Constitución.
Las fórmulas de acatamiento a la Constitución elegidas por los diputados independentistas y, en especial, por los parlamentarios en prisión preventiva también causó el primer encontronazo de la legislatura entre la nueva presidenta del Congreso, Meritxell Batet, y el líder de Cs, Albert Rivera.
Libertad de movimientos
El líder del partido naranja pidió la palabra para reprochar a Batet que hubiera permitido esta situación y que se hubiera "insultado al decoro" de la Cámara. "Se ha permitido que se hable de presos políticos en una democracia. Aquí no hay presos políticos, hay justicia: le pido que actúe para parar este tipo de actuaciones", proclamó.
Junqueras, Sànchez, Rull y Turull fueron los protagonistas de la sesión, en la que dispusieron de libertad de movimientos dentro del hemiciclo, y ante la mirada atenta del Gobierno de Pedro Sánchez, que no tuvo inconveniente en saludar y cruzar unas palabras con todos ellos. Hubo intercambios de cortesía, y otra con mayor profundidad política. De hecho, un simple "¿cómo estás?" del presidente en funciones al líder de ERC derivó en un "tenemos que hablar" por parte de Junqueras, informó ayer La Vanguardia.
Los diputados catalanes en prisión preventiva abandonaron el hemiciclo del Congreso al término de la sesión constitutiva custodiados por la Policía para volver al centro penitenciario de Soto del Real (Madrid).
Nada más decretar la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, que se levantaba la sesión, los diputados fueron dejando el hemiciclo, pero Oriol Junqueras, Jordi Sànchez, Josep Rull y Jordi Turull aguardaron unos segundos más para despedirse de sus compañeros de ERC y de JxCat, así como de diputados de otros grupos.
Segunda votación
"Fuerza", les pidieron algunos parlamentarios, y entonces cada uno de los diputados presos, acompañados por dos agentes cada uno, abandonó el hemiciclo tras haber tomado posesión y acatar sus cargos. Los últimos en salir fueron Junqueras y Sànchez, quien poco antes había estado hablando por teléfono mientras, a su lado, Turull tomaba nota en un papel.
Asimismo, Mertixell Batet fue elegida presidenta del Congreso al lograr un total de 175 papeletas en segunda votación, que requiere mayoría simple, pues no logró la absoluta en la primera, que está fijada en 176 votos.