Intenso, largo, emotivo y con todas las intervenciones posibles, telemáticas y presenciales, fue el acto central de campaña de Junts per Terrassa/Junts per Catalunya, el sábado, en la plaza del Rector Homs. En la pantalla, desde su exilio en Bruselas, el candidato a la alcaldía, el ex conseller Lluís Puig, pidió el voto para JxT "para devolver a nuestra querida ciudad una energía, una alegría y una ilusión que la haga mucho mejor", y así pasarla a nuestros hijos y nietos. "Todo lo que hacemos, por la ciudad y por supuesto por el país, lo estamos haciendo por ellos". Y tanto para los que piensan "igual que nosotros como para los que piensan diferente. Todo lo que consigamos aportar de bueno será para todos, de forma integradora, cohesionadora, como siempre hemos querido ser en Terrassa."
Puig también se comprometió a que sea cual sea el resultado del 26M, JxT "ayudará totalmente a que Terrassa tenga un alcalde de uno de los partidos que trabajan por la independencia de Catalunya". Y también a no pactar con "esta gente del club del 155. Y aquí en Terrassa tenemos un PSC que aún no ha pedido perdón por formar parte de este club con PP y Ciutadans".
La prioridad: el paro
El número 2 de la lista y actual portavoz municial, Miquel Sàmper, afirmó que JxT desarrollará las potencialidades de la ciudad en el turismo (con el Mundial de Hockey del 2022 como gran reclamo) y la industria (Els Bellots 2). "Haremos políticas de ocupación e industriales atrevidas, modernas, innovadoras, sostenibles y respetuosas con los trabajadores. Lluís Puig sabe que lo que más preocupa a los terrassenses es el paro, y por eso nuestro máximo trabajo será que las personas tengan trabajo para asi poder pasar al segundo objetivo: tener una ciudad en la que las puedas puedan ser felices y vivir bien".
También por vía telemática desdel centro penitenciario de Soto del Real, el diputado electo y ex conseller Josep Rull, que cierra la lista de JxT, afirmó que "nosotros somos la voz del progreso y la modernidad. Amamos con locura esta ciudad y este país, y queremos modernizar Terrassa porque queremos modernizar Catalunya. Y también somos la voz de la causa de la libertad".
Una victoria de Puigdemont en las europeas y de JxT en la ciudad evidenciaría, para Rull, "que el independentismo es un proyecto vinculado a la modernización, al bienestar, al progreso. Queremos la independencia porque queremos ser la Holanda o la Suecia del sur de Europa, que son países que generan un altísimo nivel de prosperidad, donde hay equidad social y el paro es muy bajo haya o no crisis".
"Patria europea y democràtica"
Y junto a Puig, en Bruselas, estaba el expresidente Carles Puigdemont, que encabeza la lista de Junts per Catalunya al Parlamento Europeo. "Puig fue y es un gran conseller de Cultura, porque siente una ciudad a través de las personas, no de los ladrillos. Sabe que Terrassa no se puede entender sin esta dimensión digamos inmaterial que tiene la construcción de la sociedad".
Para Puigdemont, estas elecciones europeas son una oportunidad de que se escuche la voz de "millones de catalanes, ciudadanos europeos, con un mensaje sobre aquello que también preocupa a Europa: el reforzamiento democrático. El 1-O, todo europeo que se reconoce en la lucha por la democracia se sintió orgulloso de compartir patria europea y democrática con los ciudadanos que fueron tan valientes de desafiar un estado abusador, que utilizó la policía para pegar gente que sencillamente protegió urnas y papeletas, que es aquello tan sagrado por lo que se fundó la Unión Europea, es decir, la democracia, aquello que los catalanes defendemos con un gran esfuerzo y un gran sacrificio".
