Su creación se forjó en una reunión en Mónaco, en el año 1955, del comité de la Unión Europea de Radiotelevisión (UER). Nacía con un noble objetivo, el de establecer lazos entre los países de una Europa que iba recuperando el pulso, después de las penalidades sufridas en la Segunda Guerra Mundial. Pero también pretendía mejorar las redes de telecomunicaciones de un medio de comunicación, la televisión, que se iba abriendo paso sin pausas y de imparable.
Se le bautizó como "Grand Prix Eurovision de la Chanson" y su primera edición tuvo lugar en la localidad suiza de Lugano, en el Teatro Kursaal, un 24 de mayo de 1956, con sólo siete países participantes. Ganó el país anfitrión, con la canción "Refrain", interpretada por la cantante Lys Assia. Los resultados nunca se anunciaron en público y, únicamente, se proclamó a la ganadora. El resto fueron segundos.
Este certamen se inspiró en el Festival de San Remo, que sigue en liza y que ha dejado para la historia canciones como "Nel blu dipinto di blu" o ""Piove (Ciao, ciao, bambina)", de Domenico Modugno o la mítica "Non ho l’età" de Gigliola Cinquetti , que hizo doblete ganando, este festival italiano y también Eurovisión el mismo año, en 1964.
España debutó en la edición de 1961, en Cannes (Francia) con la participación de Conchita Bautista, con su "Estando contigo", que acabó en la novena plaza al sumar ocho puntos. Ganó Luxemburgo, con Jean-Claude Pascal, y su canción "Nous les amoureux", que sumó 31 puntos. A partir de esta edición, siempre ha habido un representante español de forma ininterrumpida en Eurovisión.
La representación española ha subido en siete ocasiones al podio. Ha ganado en dos ocasiones, Massiel en 1968, y Salomé, el año siguiente en Madrid, con la pegadiza "Vivo cantando", a pesar de que empató con otros tres concursantes. También sumaron 18 puntos la británica Lulu con el tema "Boom Bang-a-Bang", la holandesa Jenny Kuhr con "De troubadour" y Frida Boccara, representante de Francia con "Un jour, un enfant". Puesto que no había un reglamento que decidiera que se hacía en caso de empate, se otorgó el primer lugar a las cuatro, un caso único en la historia de este certamen.
Massiel obtuvo el primer triunfo español de la historia. La artista madrileña lo hizo con el famoso "La, la, la", canción que tenía que interpretar Joan Manuel Serrat, pero el "noi del Poble Sec" se negó a hacerlo puesto que lo quería hacer en catalán y se lo prohibieron. Se pensó al enviar al Dúo Dinámico, que eran los autores de la canción, pero finalmente se eligió Massiel, entonces de gira en México, y que solo tuvo 10 días para preparar la canción. La madrileña se impuso por un punto al gran favorito de la noche, el británico Cliff Richard y su canción "Congratulations".
Desde el premio compartido de 1969, los representantes españoles no han vuelto a ganar, si bien han estado cerca con cuatro segundos puestos. Se lograron en 1971, con Karina y su "En un mundo nuevo", Mocedades y la canción "Eres tu" en 1973, la peruana Betty Missiego en 1979 con "Su canción", y Anabel Conde, ya en 1995, con el tema "Vuelve conmigo".
En el caso de 1979, la rumorología ha insinuado que desde el gobierno de entonces, presidido por Adolfo Suárez, se ordenó que no ganara Missiego, ya que se consideraba que organizar el festival siguiente, como país vencedor, suponía un gasto excesivo. Israel ganó gracias a los 10 puntos que le adjudicó el jurado español. Curioso. El grupo Bravo, en 1984, logró el único tercer puesto de la historia de España, con su canción "Lady, Lady".
El concurso, con los años, atraviesa por unos momentos en los que el interés decrece e incluso, en algunas ediciones, TVE lo emite por su segundo canal, La 2. Con la irrupción de Operación Triunfo y la participación en 2002 de Rosa López, con su "Europe’s living a celebration" en Tallin, el festival recupera todo su esplendor en España, a pesar de que, en Belgrado 2008, la aparición de Rodolfo Chikilicuatre, interpretado por el actor cómico David Fernández, y su famoso "Baila el chiki-chiki" (que sumará la nada despreciable cifra de 55 votos), hace que el certamen descienda hasta un punto ciertamente estrafalario.
Audiencia millonaria
La audiencia del Festival de Eurovisión se cifra en unos mil millones de personas, lo que otorga un papel de una gran importancia en el mundo en cuanto a espectáculo televisivo. Es el programa de televisión que ha sido retransmitido durante más tiempo sin interrupciones en el territorio europeo y es, además, uno de los más longevos a escala mundial. Irlanda, con siete, es el país que más veces lo ha ganado, mientras que Gran Bretaña, con quince, es el que más veces ha sio segundo. Eurovisión ha engullido a todos los festivales de corte similar y ha pasado a ser el más relevante con el paso de las décadas. Ni San Remo, que sigue pero sin tanta presencia, ni el de la OTI ni otros, han podido seguir su ritmo perpetuo.