Primero en La Maurina y Roc Blanc. Luego en Poble Nou-Zona Esportiva y Segle XX. Ayer, en Can Boada. Una oleada de incendios callejeros se ha llevado por delante en los últimos días, como mínimo, una veintena de recipientes.
La sucesión de quemas comenzó el domingo en la calle de María Auxiliadora. Los servicios de emergencias supieron del incendio a la 1.24 de la madrugada. Una dotación de bomberos acudió a La Maurina. No habían transcurrido ni veinte minutos cuando supieron de otro fuego semejante, este en la calle de Sicília. A las 2.23, una hora después de la primera alerta, llegó la tercera, desde la calle de Mallorca. Las llamas devoraban dos recipientes de recogida de residuos.
La destrucción de contenedores se trasladó de sitio al día siguiente. El lunes, a la 1.53 de la madrugada, los bomberos fueron requeridos porque ardían varias unidades en la calle de Vélez-Rubio. Allí ardieron tres contenedores. Y dos minutos después se quemaron tres más en la calle de Monistrol.
Entre las tres y la cuatro de la madrugada se produjeron dos incendios más, uno en la calle de Valls y otro en la del Camí de Castellar, en Sant Pere. Ayer hubo tres alertas consecutivas en las inmediaciones de la plaza de Lluís Companys.
