Fue en su vivienda, en la de él. Allí estaba con la víctima, sumida en un estado de embriaguez que él, presuntamente, aprovechó para abusar sexualmente de la mujer. Para penetrarla. Él está acusado de un delito de abuso sexual con penetración. La fiscal reclama que sea condenado a diez años de cárcel.
La Audiencia Provincial ha señalado el juicio para hoy. Según la acusación, el procesado cometió los hechos el 30 de julio del 2017 en su piso. Eran las 2.30 de la madrugada. Cuenta la fiscal que el hombre se valió de la ebriedad de la mujer para, primero, besarle la cara y el cuello. Luego llegó lo demás. La víctima intentó apartar al acusado. No lo consiguió. El hombre prosiguió. Tocó a la víctima los pechos y la zona genital por encima y por debajo d ela ropa. Le sacó las bragas de una pierna. Y la penetró.
Es autor de un delito de abuso sexual con penetración, según establece el Ministerio Público en sus conclusiones provisionales. La fiscal solicita al tribunal que imponga al inculpado una pena de diez años de prisión, y diez años más de libertad vigilada. Y una orden de alejamiento que le obligue a no acercarse a menos de mil metros de la mujer, ni comunicarse con ella, durante un periodo que exceda en diez años la pena de prisión que se le imponga.
Indemnización
La damnificada debe ser indemnizada por el acusado, según la tesis de la Fiscalía. La mujer no había mantenido relaciones sexuales con nadie antes de lo ocurrido aquella madrugada y sufre síntomas postraumáticos y de depresión. La responsabilidad civil ha sido fijada por el Ministerio Público en 80.000 euros "por los perjuicios morales y psicológicos" padecidos.
El juicio está previsto para hoy. La fiscal ha propuesto la declaración del acusado, por supuesto, y de la víctima, y de otro testigo. Y la de un agente de los Mossos d’Esquadra. Dos forenses han sido llamados también a comparecer.
