La Escodi acaba de finalizar una nueva edición de su curso de directores de establecimientos comerciales y ya van 40 desde que puso en marcha la iniciativa hace 14 años. En todo este tiempo, ha formado a 800 profesionales. El experto en recursos humanos en retail (comercio minoritario) y profesor de la Escodi Josep Maria Llaurador participa en la impartición de este curso desde sus inicios. Él se ha encargado de las últimas seis sesiones, centradas en cómo dirigir personas y en la gestión del tiempo.
¿Qué idea ha querido transmitir a sus alumnos?
Que está todo en sus manos, que deciden ellos. Lo que hacemos aquí básicamente es darles herramientas para que puedan escoger su manera de actuar, para que sean flexibles y actúen de manera diferente a como lo hacen siempre.
¿Cuáles son las claves para escoger un buen equipo y gestionarlo?
Elegir es difícil porque muchas veces el grupo te viene dado. Como director de un equipo uno tiene que buscar su sitio y averiguar si tiene madera de líder, lo que supone un trabajo largo en el tiempo.
Bien, ya tenemos al equipo, ¿cómo lo gestionamos?
Lo primero de todo es escuchar y observar antes de actuar. Una vez que se tiene un mapa mental de cómo es ya se puede gestionar y marcar objetivos. Y hay que saber cómo se consigue el liderazgo de ese grupo, que no siempre se logra.
¿Gestionar también es ordenar?
Depende. Si tienes un estilo autoritario, sí, pero puedes tener uno democrático y no tener que dar las órdenes, sino plantear los problemas al grupo y decidir entre todos.
Siguiendo este planteamiento, ¿la opinión de un miembro del equipo puede valer igual que la de su responsable?
¿Por qué no? Se puede dirigir a gente que sepa más que tú. Lo que hay que tener claro es quien manda.
¿La humildad es una de las características para dirigir un equipo?
Sí, es bueno que exista. El liderazgo no se consigue imponiendo uno su punto de vista. Se logra cediendo y haciéndolo evidente, no imponiéndose… ¿Por qué? Porque el liderazgo solo llega por la parte emocional y la imposición no es positiva para las emociones.
¿Cómo sacar todo el rendimiento posible a un equipo?
Hay que plantearse varias cosas, como si la gente que forma el equipo es competente o no, si el grupo está acostumbrado a tomar decisiones o que las tomen otros… Al final eres tú como responsable de ese equipo el que tiene que cambiar para adaptarte a él. Y a partir de aquí, conociéndolo, sabremos lo máximo que puede rendir.
¿Y los incentivos?
Ayudan. Algunos pueden ser económicos y otros de tipo moral. Depende del equipo.
Un buen sueldo también ayuda.
El sueldo es individual, no tiene nada que ver con el equipo. Y de hecho, en un equipo los sueldos deben ser diferentes porque no todos sus miembros funcionan igual ni rinden lo mismo.
¿Cómo mantener contento y motivado a un trabajador del grupo?
Eso depende de los recursos humanos y de su jefe de equipo. Aparte de las políticas de recursos humanos para mantener a los buenos empleados, el papel del jefe del equipo es clave. Lo digo porque aunque tengas un buen sueldo y posibilidad de promoción, si tus jefes son unos maltratadores o te presiona mucho te irás. Por eso es tan importante para las empresas formar buenos jefes de equipo.
Hablemos del pequeño comercio, ¿cuál es su situación a la hora de encontrar buenos empleados?
Bueno, bonito y barato no existe. Eso de ‘pagaré 800 euros al mes, trabajando también fines de semana, a alguien que domine tres idiomas y sea bueno’ no puede ser. Y si alguien acepta esa propuesta durará dos días porque si es bueno en cuanto le salga otra oportunidad se irá. Ese es el problema del comercio minorista y la restauración: para los sueldos que hay el nivel de las personas que acceden es el que es.
¿Está diciendo que el pequeño comercio está en una situación precaria y solo puede ofrecer condiciones laborales precarias?
Sí. La gente necesita trabajar y la empresa quiere tener beneficios.
¿Ese es el futuro?
No tiene por qué. Hay países en que ya está más valorado el facto del comercio. ¿Hay que renunciar a tener beneficios? Pues no, pero quizá hay que plantearse si se quieren beneficios a corto plazo o tener más beneficios a más largo plazo. Por norma general aquí se opta por lo primero: paga poco y vende mucho. Y así se dura dos días.
Propone bajar el margen de beneficios y pagar más al empleado?
Claro, y así no se irá, estará más formado y el cliente estará más contento y volverá.
¿Pero hay posibilidad de bajar el margen de beneficios, si éste de por sí ya es pequeño?
Tengo mis dudas de que ese margen sea tan pequeño… quizá es que estamos habituados a unos que deberían ser menores. Y ahí está el comercio digital apretando. Lo que diferencia al retail de las compras por internet es el trato personalizado. El futuro en el comercio minorista está en ofrecer ese valor añadido, esto es, trato personalizado y servicios que los diferencien del resto, en vez de competir en precios. Estos últimos no aguantan. Y para ofrecer ese valor añadido hay que tener buenos empleados, preparados y que estén a gusto.