Las bases de la Assemblea Nacional de Catalunya en Terrassa secundan los documentos estratégicos -estatutos, reglamento interno y hoja de ruta 2019-20- que se debatirán en la asamblea nacional del próximo 5 de mayo. La militancia se reunió el jueves por la noche en la sede de Amics de les Arts en asamblea extraordinaria y, tras debatir las propuestas, acordó secundar sus postulados y no presentar enmiendas al redactado.
La hoja de ruta de la ANC para los próximos dos ejercicios es el documento más relevante. En ella, la asamblea plantea el escenario de unas elecciones autonómicas en las que poder hacer efectiva la independencia por la vía unilateral si las formaciones netamente independentistas superan el 50% de los votos en las urnas. La ANC no ve viable un referéndum pactado con futuros gobiernos socialistas o del PP y da por hecho una sentencia condenatoria en el juicio al "Procés".
La Assemblea cree que después de las elecciones generales del 28A no habrá "ninguna oferta mínimamente digna para el independentismo ni para un nacionalismo moderado".
El único supuesto en el que renunciarían a la unilateralidad sería una oferta de referéndum "sin ambigüedades", con respuesta binaria y siempre que presos y exiliados estuvieran liberados y de vuelta a casa.
La ANC plantea como condición a la ruptura con el Estado la unidad del Govern, el apoyo del Parlament, las instituciones y la ciudadanía. ERC ha descartado la vía unilateral y JxCAT no la tiene como objetivo prioritario, de manera que el planteamiento de la ANC parece inviable a corto plazo.
En su hoja de ruta la entidad apuesta por una estrategia unitaria y anuncia que evidenciará aquellas formaciones que renuncien a ella. Además, insta a los partidos a no permitir la gobernabilidad de España ni la aprobación de ninguna iniciativa del Congreso tras el 28A.