"Esta es la oportunidad decisiva". Para las elecciones municipales, para las europeas. Bea Talegón clamó el domingo por la unidad de los independentistas en un acto organizado por Junts per Catalunya que reunió a cientos de personas en el Parc de Sant Jordi. "O nos unimos o nos comen", declaró la exmilitante del PSOE. A su lado, Jaume Alonso-Cuevillas, abogado de Carles Puigdemont, también abogó por la unidad y aseguró que la sentencia a los acusados del proceso del 1-O "está decidida": será condenatoria, pero atenuada.
Atenuada porque rebajará algo las pretensiones acusatorias "para lograr la unanimidad" del tribunal. Según el letrado, la responsabilidad penal será "por conspiración para la rebelión". Alonso-Cuevillas dijo que el juicio es "una operación de castigo" y adelantó dos noticias. La primera, mala: "Nos harán sufrir mucho, el camino será doloroso". La segunda, buena: "Ganaremos, no tengáis ninguna duda".
Divide y vencerás
Alonso-Cuevillas subrayó la necesidad de la unidad. Antes lo había hecho, con vehemencia, Bea Talegón. Habló de "sensación de frustración" después de un acontecimiento histórico como la movilización del 1-O. Según ella, al Estado lo que le dio miedo fue la transversalidad de un movimiento que traspasó a los partidos.
La estrategia de respuesta fue el "divide y vencerás", que se inició con represalias "a los cabecillas", sobre todo a Jordi Cuixart y Jordi Sànchez, líderes de Òmnium y ANC, "que representaban a cantidad de gente, por encima de partidos". La estrategia "les está empezando a funcionar". El pueblo manda, añadió Talegón: "Nos dan igual las movidas entre ellos", dijo en alusión a las desavenencias políticas.
