El Teatre Principal fue el escenario de un acto preelectoral organizado por el PSC de Terrassa, con Alfredo Vega como principal protagonista, y en el que también participaron el primer secretario de esta formación en Catalunya, Miquel Iceta, y el ministro de Asuntos Exteriores del gobierno español, Josep Borrell, que llegó más tarde de lo previsto. El acto, presentado por la periodista egarense Mari Luz García, contó con un numeroso público que pobló las localidades del recinto.
Tras las presentaciones de rigor por parte de García, que dio la bienvenida a "la fiesta de la familia socialista", se pudo visionar un video que repasó los 40 años de existencia del PSC. Después, el primero en hablar fue Iceta, que dijo que en el partido "estamos lanzados, contentos y esperanzados y, como siempre, trabajando".
El primer secretario del PSC en Catalunya señaló que "los grandes proyectos, y también los pequeños, se levantan trabajando" y, ya inmerso en las referencias a su anfitrión, comentó que "Vega me recuerda esa película de John Ford, "El hombre tranquilo" y esto es lo que necesita Terrassa". Y añadió que el alcalde actual de Terrassa es un hombre tranquilo y "lo ha demostrado en momentos difíciles, en los que ha mostrado serenidad, fortaleza y liderazgo".
Iceta recordó que Terrassa es la tercera ciudad de Catalunya y "vamos subiendo" y la definió como una ciudad "trabajadora, emprendedora y con ambición". Volviendo a Vega, insistió en que lo que distingue al alcalde es que "tiene claridad de objetivos, un talante dialogante y capacidad pedagógica". En referencia a la política catalana, Iceta aseguró que "Catalunya merece un buen gobierno, y ahora no lo tiene" y también manifestó que "si no saben, si no quieren o si no pueden gobernar, que lo dejen". Y, además, apuntó que en Catalunya hay un problema político que "se ha de resolver con la política".
Símbolo de lucha
Por lo que respecta a Vega, que vio interrumpido su discurso unos segundos por la llegada a última hora de Borrell, llevaba una rosa roja que dijo que ve cada día en la alcaldía desde que accedió a ella. Recordó que es un emblema para los socialistas, y definió esta flor como "un símbolo de la lucha y los anhelos de millones de personas para construir un proyecto de igualdad en el que cabe todo el mundo, y para ganarnos un futuro y construir una ciudad y un país mejor". Dicho esto, el alcalde, le entregó la rosa a su esposa entre los aplausos del público asistente.
Vega recordó que a los socialistas "se nos ha criticado mucho y hemos pasado una etapa de muchas dificultades", aunque admitió que "hemos pasado por contradicciones y es bueno reconocerlo". Se preguntó "¿qué sentido de la democracia tienen algunos que quieren impedir que nos expresemos?", en clara alusión al grupo de personas que se manifestaron fuera del Teatre Principal contra la presencia, es especial, de Borrell, y afirmó que "no permitiremos que nos impongan un pensamiento único y el totalitarismo que dicen combatir". El alcalde de Terrassa declaró que "este país lo que se merece es que se hable de futuro, de democracia, de convivencia y, también de igualdad".
El muro más firme
Por otra parte, Borrell habló de la cuestión catalana y explicó que "el muro más firme ante el independentismo somos nosotros" y agregó que "también somos los que aportamos soluciones para garantizar la convivencia en esta tierra".
El ministro de Asuntos Exteriores también aseguró que los socialistas "somos los que queremos encontrar soluciones a los problemas, no vivir de ellos" y añadió que lo que tenemos que hacer es hablar y este gobierno lo ha intentado". Borrell apuntó que "no queremos que este conflicto se enquiste y hay que desarmar a las palabras".