Refundado en 1996, con el mismo ideario de la entidad que con este nombre existió entre 1879 y 1898, el actual Ateneu Terrassenc tuvo su primera sede en la calle de Antoninus Pius. Un local de alquiler, "a cuyo pago se destinaban casi íntegramente las cuotas de los socios, insaluble por la humedades que tenía, pequeño, con una única sala", recuerda su secretario, Josep Maria Sans, pero que permitió reiniciar la andadura ateneística en la ciudad. Allí estuvo el Ateneu hasta 2011, en que firmó con el Ayuntamiento un contrato de cuatro años, renovable por otros cuatro, por el cual les cedía el local que han ocupado hasta ahora en el número 39 del Passeig del Vapor Gran, aunque sin carácter exclusivo. El Ateneu podía desarrollar sus actividades con la condición de llevar la gestión de un inmueble "que también es un colegio electoral, y un espacio donde se han celebrado reuniones de vecinos, o actos municipales sin relación con nuestra programación, cuando se ha solicitado. También acogíamos talleres y grupos de personas que no eran socios pero que aprovechaban su dinámica".
Los ocho años finalizaban mañana, y el Ayuntamiento no ha querido realizar otro contrato para que el Ateneu Terrassenc siguiera en el Vapor Gran. "Nos encontramos con poca comprensión y escaso aprecio por lo que estábamos haciendo", lamenta Sans. Y ha sido necesaria "una negociación larga con el Ayuntamiento, con momentos en los que parecía que el Ateneu Terrassenc iba a desaparecer, porque algunas de las propuestas que nos hacían eran imposibles de aceptar", para que finalmente les cediera (también por cuatro años renovables por otros cuatro) la primera planta del edificio del número 2 de la calle de Sant Quirze.
Se trata de un inmueble de titularidad completamente municipal, ubicado en el solar donde en 1915 se construyó un magnífico edificio modernista, obra del arquitecto Josep M. Coll i Bacardí, para el Centre Mèdic de Terrassa. Como otras joyas del modernismo terrassense, fue derruido en la década de 1950, en este caso para construir el edificio actual, de arquitectura funcional y pensado para que albergara los Juzgados. Después fue la sede del Institut Municipal de Cultura i Esports de Terrassa (Imcet) y del Centre de Normalització Lingüística de Terrassa, y actualmente llevaba unos años en desuso.
Los metros cuadrados de que dispondrá el Ateneu Terrassenc en su nueva ubicación son aproximadamente los mismos que en la actual (unos 280), "pero con una peor distribución. Hemos de hacer un esfuerzo para adaptarnos. En Vapor Gran hemos tenido una sala de actos-auditorio con una capacidad de 110-115 asistentes, que ahora debe ser la habitación donde se desarrollaban los juicios, donde no caben más de cincuenta". Pese a este handicap, los espacios de esta nueva sede permiten mantener todas las actividades, cursos y talleres que actualmente desarrolla el Ateneu. "Toda la gente está colaborando mucho en la mudanza y entusiasmada y con ganas de continuar."
De uso exclusivo
No obstante, "ganamos en autonomía", porque el Ayuntamiento les cede el uso exclusivo de la planta. En ella se desarrollará únicamente la programación de actividades del Ateneu. El Ayuntamiento ha sufragado un acceso adaptado para superar los ocho escalones de la entrada, la instalación eléctricay la calefacción. El edificio cuenta también con unos sotanos y pisos superiores que se mantienen sin uso.
El Ateneu Terrassenc inaugurará su nueva sede el próximo martes 5 de marzo, con un acto con Vicenç Villatoro. El escritor terrassense presentará su nuevo libro, "Massa foc". La entidad mantiene el concierto de swing que tenía programado para el 10 de marzo en la plaza del Vapor Gran, como aportación al Festival de Jazz. "Ahora no tendremos un exterior donde organizar actividades. Para el próximo año, se abren muchas incógnitas".