Hoy se reemprende en el Tribunal Supremo el juicio del "procés". En la cuarta sesión de la vista, la segunda de interrogatorios a los acusados, están previstas las declaraciones de Jordi Turull, Raül Romeva y probablemente también del ex conseller egarense Josep Rull, cuya comparecencia podría continuar mañana o, si las intervenciones de sus predecesores se alargan hoy, posponerse íntegramente al miércoles.
En el día en que espera explicarse ante la Justicia, Josep Rull ha querido compartir con los lectores de Diari de Terrassa sus reflexiones sobre el juicio, las acusaciones a las que hace frente, adelantar sus argumentos de defensa y también las impresiones más íntimas de su estancia en la prisión de Soto del Real.
Durante los próximos días, Diari de Terrassa tiene previsto transcribir los escritos que, a modo de diario personal, pueda hacer llegar a nuestra redacción y que abren una línea directa con el banquillo de los acusados del "procés".
Desmontar tres acusaciones
"Me someteré al interrogatorio del Ministerio Fiscal y de la Abogacía del Estado. No contestaré a Vox". Josep Rull confirma desde Soto del Real que seguirá la estrategia de Joaquim Forn y Jordi Turull de responder a las preguntas de la defensa y de las acusaciones del Estado, pero rechazar las de la acusación popular ejercida por elpartido de extrema derecha Vox. La suya será pues una intervención técnica, pero también política.
Rull comparece ante el Tribunal Supremo con "cinco objetivos", el primero de los cuales es, afirma, "desmontar las tres acusaciones que me hacen".
La primera de ellas, "haber firmado la hoja de ruta el año 2015, que es la base de un programa electoral, votado mayoritariamente el 27 de septiembre del mismo año". Ante el tribunal, Rull preguntará "¿cómo puede ser delito hoy aquello que no tuvo ningún reproche penal entonces?", nos adelanta.
En la instrucción se le acusa también de "haber participado en reuniones preparatorias de la estrategia independentista, pero no me dicen cuando, dónde, con quién ni para hacer qué", apunta el ex conseller.
La tercera acusación está relacionada con la negativa de Josep Rull, como conseller de Territori i Sostenibilitat, a autorizar que el barco de Policía Nacional desplazado para impedir el 1-O amarrara en el puerto de Palamós. "Hubiera sido una irresponsabilidad como conseller -se defiende- desmantelar la actividad de cruceros y de carga, turística y comercial, de un puerto pequeño".
En el manuscrito que remite a El Diari, Rull responde también a la imputación del delito de malversación afirmando que "no se ha podido acreditar la utilización de un solo euro público en la organización del referéndum. Nos persiguen por unas ideas legítimas, no por unos hechos delictivos".
Fuera de la sala de vistas, el procesado explica que los días previos a las sesiones del juicio los dedica mayoritariamente "a estudiar los escritos de acusación. Los argumentos de nuestra defensa. Nos sumergimos en los miles de folios que configuran la causa". Son, explica, "horas y horas frente al ordenador, capado, que después de una batalla agotadora tenemos en la celda".
En las primeras jornadas del juicio del "procés", Josep Rull relata cómo los doce procesados se han ido familiarizando con el Salón de Plenos del Tribunal Supremo, "este escenario grandilocuente -describe- presidido, qué paradoja, por un escudo republicano de España (sin las flores de lis borbónicas)".
En la sala de vistas, el político egarense se empleará a fondo en cumplir los objetivos que comparte hoy con Diari de Terrassa y que, explica, persiguen desmontar los delitos de rebelión y malversación que le imputan. También defender la legalidad del derecho de autodeterminación del pueblo catalán.
Argumentará que "no hemos cometido ningún delito" porque "la convocatoria de un referéndum no pactado con el Estado se despenalizó el año 2005". Además, sostiene, "la declaración política de la independencia de una parte del territorio del Estado, sin violencia, se despenalizó el año 1995".
Josep Rull centrará hoy sus tres objetivos restantes en defender que "democracia y autodeterminación son derechos inseparables". El político terrassense argumentará ante el Supremo que el conflicto catalán es "político y debe resolverse políticamente, amparados en el principio democrático".
El juicio del "procés" es especialmente relevante, reflexiona, en el actual contexto político de "una Europa asediada por la extrema derecha obsesionada en recortar derechos y libertades". Y advierte, "si el Tribunal (Supremo) avala los planteamientos de la Fiscalía y de la Abogacía del Estado de un gobierno pretendidamente progresista, los derechos de manifestación, de reunión, de libertad ideológica quedarán vacíos de contenido".
Con la fuerza de la gente
Durante los primeros días de la vista se ha visto a los doce procesados por la causa contra el 1-O -Oriol Junqueras, Jordi Sánchez, Jordi Cuixart, Carme Forcadell, Jordi Turull, Raül Romeva, Joaquim Forn, Josep Rull, Dolors Bassa, Carles Mundó, Meritxell Borràs y Santi Vila- serenos ante el alto tribunal. Rull asegura que esa actitud se sustenta en el apoyo de "tanta gente. Personas que nos acarician el alma y miles de cartas repletas de humanidad".
"La esperanza es más poderosa que el miedo", reflexiona Josep Rull en su escrito, horas antes de declarar ante el Supremo. Una reflexión personal que concluye con un mensaje directo a los terrassenses: "¡Hasta pronto en la Plaça Vella! ".
