Les echaron el guante justo antes de que asaltasen las viviendas que tenían previsto asaltar, en la calle de Prat de la Riba y la del Escultor Armengol. Unos mossos d’esquadra de paisano sorprendieron y detuvieron el martes a dos de los tres tipos a los que vieron merodeando por bloques de pisos de Vallparadís. Un tercer sospechoso escapó.
Los Mossos d’Esquadra habían montado, como otras veces, un operativo de prevención de robos en viviendas. El martes al mediodía unos agentes de paisano observaron en Vallparadís a dos tipos que les infundieron sospechas.
Estaban en actitud vigilante mientras hablaban por teléfono delante de un portal. En ocasiones aparecía junto a los dos sujetos un tercero con el que los dos primeros intercambiaban palabras. Cerca había un coche aparcado al que los sospechosos se aproximaban cada cierto tiempo. Los policías decidieron actuar cuando vieron que los tres tipos se disponían a irse.
Los individuos huyeron, pero los agentes pudieron agarrar a uno. Los otros dos escaparon a la carrera. Los agentes avisaron a su central y otra unidad acudió a la zona. Esa segunda dotación fue la que localizó a uno de los dos sospechosos fugitivos. Eran dos los apresados. Un tercero consiguió huir.
Herramientas en el coche
Unos policías inspeccionaron el coche. Los objetos encontrados en el vehículo confirmaron los barruntos de los mossos: allí dentro hallaron herramientas diversas y llaves que los ladrones expertos usan para abrir puertas de viviendas con el método del "bumping", consistente en introducir una llave maestra en la cerradura hasta abrirla a golpes repetidos. También portaban guantes, gorras negras y pañuelos para taparse el rostro. En los bolsillos llevaban auriculares para comunicarse entre ellos.
Los mossos averiguaron que los ladrones iban a robar en pisos de la calle de Prat de la Riba y la del Escultor Armengol. Pero los cogieron antes. Los dos detenidos, rumanos y con antecedentes, pasaron a disposición judicial y están en libertad con medidas cautelares.