Más allá de la canción, uno de los elementos que tiene mucho peso en Eurovisión es la puesta en escena. Preguntada por ello, Ana María Bordas, jefa de la delegación española en el festival, explicó que por ahora no hay nada cerrado pero dejó claro que "nos vamos a preocupar para que sea estupenda. La canción da mucho juego y es muy importante que en el escenario se transmita la fuerza y la alegría del tema".
Bordas avanzó que es poco probable que otro "triunfito" acompañe a Miki en el escenario de Tel Aviv, aunque no confirmó ni desmintió nada. Por su parte, Miki dejó la puerta abierta a que los miembros de Dalton Bang, el grupo de versiones que lideraba el joven hasta su entrada en "Operación Triunfo", le acompañen en Israel. "Yo no me imagino en un escenario sin la gente que me ha acompañado siempre. Si solo depende de mi, esta es una muy buena opción. Sería increíble", dijo el cantante. Además, Miki afirmó que se imagina "muy cerca del público para transmitir esa alegría y festividad que tiene la canción", del mismo modo que aseguró que le gustaría empezar su actuación entre el público, como ya hizo el domingo.
En cuanto a la canción, Salas admitió que cree que "se puede mejorar". "Cuando grabas un disco nunca piensas que está bien del todo, siempre hay algo que cambiar. Seguiremos trabajando con ella y seguramente habrá cambios", especificó.
