La gripe es una enfermedad respiratoria vírica y contagiosa que todos los años da la vuelta al mundo y llega a Catalunya a mediados de diciembre, para actuar como epidemia durante el mes de enero y parte de febrero.
Los síntomas habituales de la gripe son fiebre, tos, dolor de cabeza y malestar general. La sintomatología dura unas dos semanas y se cura sin la necesidad de tomar medicamentos, aunque para evitar las molestias de la infección se puedan ingerir fármacos específicos. Los antibióticos no curan la gripe.
Solo en el caso de los niños y las personas con patologías crónicas o enfermedades graves la gripe puede complicarse y provocar cuadros de gravedad. En estos casos, y también entre las personas que traten habitualmente con grupos de riesgo, se recomienda la vacunación.
Como la mayoría de las afecciones respiratorias, la gripe se transmite por el aire, especialmente a través de la tos y los estornudos de los infectados.
Las medidas de higiene son claves para frenar el avance de la epidemia. Los afectados de procesos gripales o de gripe deben cubrir su boca con un pañuelo de papel o con una mascarillas. Además, se recomienda a toda la población lavarse las manos a menudo, especialmente después de haber tocado espacios comunes como barandas de escaleras o asideros en transporte público.
