Muchos rodajes de películas han tenido lugar en Terrassa, pero ninguno ha acabado tan mal como el de "Lo que nunca muere" (1955), de Julio Salvador, realizado en los últimos meses del año anterior. La historiadora Ana Fernández Álvarez lo recuerda en su estudio "Una història fílmica a Terrassa envoltada de tragèdia", que publica como separata (la 229) del último número del boletín de la Associació de Col·leccionistes de Terrassa.
Un primer incidente se produjo el 3 de octubre de 1954, cuando el protagonista (y productor) de la película, Conrado San Martín sufrió un ataque de apendicitis. Trasladado de inmediato a la clínica de Sant Josep Oriol de Barcelona, fue intervenido de urgencia, con éxito.
La tragedia aconteció el 28 de octubre, día en que rodaron en el aeropuerto de Sabadell. Tras la comida, la actriz Mercedes de la Aldea, de 22 años, "se levantó con la intención de hacer un vuelo en una avioneta Pipper que estaba parada pero con el motor en marcha", escribe Fernández. Conrado San Martín se lo desaconsejó, "pese a lo cual ella insistió diciendo ‘¿qué me puede pasar?’. Pregunta que fue respuesta por el actor con un ‘lo mínimo, que vomites lo que acabas de comer’. Aún así, ella decidió realizar el vuelo".
Golpeada por las hélices
De pronto, un ruido seco hizo que el actor se girara "y viera como la actriz caía fulminada bajo las hélices de la avioneta y al piloto con las manos en la cabeza y una mirada de profundo terror". Mercedes de la Aldea fue trasladada en la ambulancia del aeropuerto a un dispensario de Sabadell, donde los médicos, "conscientes de la gravedad de sus heridas, decidieron enviarla a la clínica Platón de Barcelona, donde murió". San Martín ha dejado un emotivo testimonio de este accidente en la edición del diario La Hoja del Lunes del 1 de noviembre de 1954.
"Lo que nunca muere" narra la historia de dos hermanos que en la Guerra Civil luchan en bandos opuestos. En Terrassa se rodaron diversas escenas con un batallón de soldados que entre 1949 y 1959 estuvo instalado en los terrenos de Can Montllor. Hicieron de regulares del ejército nacional. Mercedes de la Aldea tenía el papel de una enfermera que al final de la película fallecía ametrallada por los republicanos.
