Diecinueve serán las funciones que se ofrecerán de los doce espectáculos programados dentro de la 36ª temporada de Dansa del Centre Cultural. Ayer se presentó una programación aún más ambiciosa que la de años pasado, una mejora alentada por un crecimiento muy significativo del número de espectadores en los últimos cuatro años. Las diez funciones programadas en 2015 atrajeron a 4.577 espectadores, pero ya en el último año estas cifras han crecido hasta alcanzar los 11.758 espectadores en diecisiete funciones.
Ignasi Cusidó, presidente de la Fundació Antiga Caixa Terrassa, contó que "cuando asumimos la responsabilidad del Centre Cultural, hace seis años, en las primeras funciones de danza era difícil cubrir la mitad o tres cuartas partes de la sala." De esa nueva etapa iniciada en plena crisis se ha pasado a espectáculos de los que, en muchos casos, deben celebrarse dos funciones, y en estos las entradas pueden llegar a estar agotadas.
Con las diecinueve funciones con las que contará la nueva temporada (quizá veinte, porque hay una función que se podría añadir en el caso de Víctor Ullate), se espera poder llegar a los catorce mil espectadores. Con todos esos datos, y con el hecho de poder acoger en la actualidad al Ballet de Catalunya como compañía residente, uno de los "retos" del Cultural es conseguir el reconocimiento de la ciudad como referente de la danza.
El Ballet de Catalunya "ya tiene programadas seis funciones para el año que viene" en el marco de una residencia que "nos ha permitido montar el programa pedagógico ‘Exploradors de dansa’", con 1.400 alumnos inscritos en su primera edición. También han sido exitosas las "master classes" ofrecidas por bailarines de primera línea a bailarines ya iniciados, lo que redunda en la eficacia y buena respuesta de una actividad que es singular dentro de Catalunya.
De este modo, habiéndose convertido la danza "en uno de los símbolos y referencia como elemento identificador de la ciudad", Cusidó le pidió al alcalde Alfredo Vega, sentado a su lado durante la presentación ante los medios de comunicación de la temporada, el reconocimiento de la danza como seña de identidad de Terrassa, tal como ya lo son el hockey o el jazz.
94% de ocupación
Alfredo Vega tomó el testigo y reconoció que "la danza se lo ha ganado", abriendo la posibilidad de este reconocimiento. También felicitó a los responsables del equipamiento por haber logrado ese 94 por ciento de ocupación.
Por su parte, Albert Sant (director del Centre Banca Clients de BBVA Terrassa) remarcó el valor de un apoyo que "nace del convencimiento de que la cultura es un bien indispensable y necesario para una sociedad de futuro.".