Acababa de cumplir los 21 años y era la primera vez que podía ejercer su derecho al voto. Alfredo Vega, actual alcalde de Terrassa, metió en la urna la papeleta del "sí" aquel día de diciembre.
Recuerda la ilusión reinante: "Queríamos dar consistencia a la situación para salir de la oscuridad". Vega estudiaba Magisterio. Cuarenta años después, este profesor, máximo mandatario local y candidato a la alcaldía por el PSC para las próximas elecciones municipales, valora esas cuatro décadas de una Constitución que ha permitido "una época de progreso y buena convivencia". Cierto es, añade, que todas las constituciones traen de la mano la polémica, y él no la rehúye: "Las constituciones deben adaptarse a cada generación. Nuestra Carta Magna ha hecho un gran trabajo pero necesita ser actualizada, adecuarse a los nuevos tiempos".
Debe abrirse un debate para la reforma. La del Senado, por ejemplo, para convertirlo en una cámara federal. "Vamos tarde, pero debemos intentarlo teniendo en cuenta que cualquier constitución es fruto del diálogo y del pacto, y eso implica siempre concesiones para lograr una ley que regule la convivencia, con voluntad política. Se requieren condiciones que posiblemente ahora no se dan, pero lo bueno sería empezar a hablar", reflexiona el edil.