Terrassa

La Terrassa de los 60 revive en las fotografías de Jordi Aparicio

Unos operarios instalan una línea telefónica en la Plaça Vella, ante la Casa Poses, y un Seat 600 circula por la calle de Gavatxons entre los rótulos de Jornet y TV Phillips y la librería Grau. Un concurso sardanista de 1964 en el Portal de Sant Roc, con el Snack Bar Pompeya y la Escola Torrella, desaparecida joya modernista, al fondo. La basílica del Sant Esperit y el Castell Cartoixa, bajo la nevada de 1962. Son cuatro de las fotografías, todas magníficas tanto en lo estético como en lo testimonial, que forman la exposición de Jordi Aparicio (Terrassa, 1928) inaugurada el viernes en la remodelada sala de Arxiu Tobella.

El pasado año, Aparicio hizo donación a Arxiu Tobella de su fondo fotográfico, formado por unos 6.800 negativos, 1.600 de los cuales son de temática estrictamente terrassense, en buena parte del barrio de Ègara, donde vivía (los otros, de tipo familiar y de paisajes foráneos). De entre ellos, la comisaria de la exposición, Teresa Llordés, ha seleccionado imágenes casi todas de los años sesenta, alguna de los setenta, estructuradas en cuatro bloques: la ciudad en construcción; el ritmo de la su vida cotidiana; sucesos (nevadas, incendios, riadas); y entretenimientos y actos lúdicos.

También se incluyen cuatro espectaculares e inesperadas panorámicas "que no sé si Jordi Aparicio las había visualizado en papel", señaló Llordés, en el concurrido acto inaugural. "Fotografiar la Banda Municipal en el Parc de Sant Jordi en panorámica era arriesgado. Quizá no tenía suficiente angular."

Aparicio trabajaba en la empresa AEG y, los fines de semana, comenzó a realizar crónicas deportivas para el diario El Mundo Deportivo y radios. "Había ido alguna vez al grupo fotográfico del Casino del Comerç, pero no estuvo especialmente vinculado a él. Decía que se sentía básicamente periodista, que quería hacer noticias. Al coincidir en la AEG con José Manuel Salillas, formaron equipo", explicó Llordés en un breve trazo de su biografía.

En 1954, AEG estableció la jornada intensiva, y Aparició se empleó por la tardes en Fotos Francino, un gran establecimiento, como no lo había entonces en la ciudad, que atendía todo tipo de trabajos fotográficos . "Para Fotos Francisco, Jordi Aparicio cubrió muchos actos, tanto de tipo social, como reportajes para el diario La Vanguardia como encargos del Ayuntamiento."

Documentalizadas
El fondo ha sido digitalizado y documentalizado, y Llordés agradeció, en este sentido, las aportaciones de Ferran Pont Puntigam, Ferran Pont Montaner, Josep Maria Torrella y, especialmente, Rafel Comes, para saber los lugares, las fechas, los hechos y las personas de muchas fotografías. Algunas aún presentan incógnitas, y Arxiu Tobella agradecerá a cualquier persona que pueda aportar información sobre ellas. También está pendiente un trabajo de investigación en el Arxiu Històric, donde podrían descubrirse más fotografías de Aparicio.

"A mis 90 años, y después de estas explicaciones tan bien dadas, solo me queda dar las gracias a todas las personas que me han ayudado", afirmó Jordi Aparicio. "Fueron muchos años de fotografía, realizada con elementos tan diferentes de los que se utilizan hoy en día. Gracias, sobre todo, a todos los que me han ayudado a hacer posible esta donación y esta exposición."

El acto inaugural de "Crònica gràfica de Terrassa" lo fue también de la remodelación de la sala de exposiciones de Arxiu, que añade dos dependencias y recupera los techos originales, explicó el arquitecto, Ferran Pont Montaner.

LOS DATOS 

Exposición: "Crònica gràfica de Terrassa"

Autor: Jordi Aparició

Lugar: Arxiu Tobella

Fechas: Hasta el 19 de enero

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