Dos conmemoraciones en una. La diócesis de Terrassa celebró el domingo dos eventos íntimamente relacionados: la segunda Jornada Mundial de los Pobres y el quinto aniversario de la creación de Càritas Diocesana. El acto central de ambas citas se celebró en el recinto ferial de Sabadell.
A la una de la tarde, Josep Àngel Saiz Meneses, obispo de Terrassa, presidió la celebración de la misa y una hora después más de novecientas personas participaron en un gran ágape de hermandad. Todos pertenecían a “la gran familia de Càritas”, en palabras del prelado egarense. Esa “gran familia” la conforman los destinatarios del trabajo de la entidad, pero también los colaboradores, los voluntarios, los profesionales y los sacerdotes y diáconos. Fue, según el obispado, “una celebración jubilosa y bien vivida que sirvió para dar gracias a Dios” por los cinco años de existencia de Càritas Diocesana de Terrassa. Antes la organización estaba integrada en la de Barcelona y la de Sant Feliu de Llobregat.
Compartir mesa
Concejales y alcaldes de los 53 municipios de la diócesis egarense acudieron al ágape, en la que los integrantes de la institución católica pudieron compartir mesa “con las más pobres y necesitados”. El obispo repartió comida. Los Pueri Cantors actuaron durante la Eucaristía. Animaron la comida y la sobremesa la Escola Municipal de Música de Palau-solità i Plegamans y el grupo de habaneras “Els escamarlans”. Càritas se había propuesto reunir a quienes forman la institución para celebrar su aniversario con el lema “Cinco años sembrando semillas de esperanza”. El mismo día se celebró la segunda Jornada Mundial de los Pobres.