La cuenta atrás para el Gran Recapte ya se ha iniciado. La gran cita anual solidaria para recoger alimentos para las personas necesitadas se celebrará los próximos viernes, 30 de noviembre, y sábado, 1 de diciembre en muchos municipios de Catalunya y Terrassa será de nuevo uno de ellos.
A lo largo de las dos jornadas, miles de establecimientos aparecerán con sus grandes cajas de cartón, principalmente en las puertas de acceso, para que los clientes hagan su contibución. Una vez más, la organización hace un llamamiento a productos básicos como leche, aceite y cereales. Productos que tenga un periodo de caducidad durante un tiempo y no caduquen deprisa.
Terrassa, como es habitual, volverá a ser una de las ciudades implicadas en la nueva campaña del Banc d’Aliments de Catalunya, que cuenta con cuatro delegaciones centrales en Barcelona, Girona, Lleida y Tarragona.
El año pasado, los terrassenses donaron unas 106 toneladas de alimentos y hubo 944 voluntarios. Ambas cifras marcaron un antes y despuéss. La recogida se incrementó y fue superior a la del año anterior (103 toneladas en 2016) y también aumentó de modo considerable la cifra de voluntarios en el mismo periodo.
Precisamente, el Banc d’Aliments de Catalunya ha iniciado ya su campaña enfatizando el voluntariado. Los días del Gran Recapte requieren de una gran logística y se necesitan muchas personas para cubrir los diferentes turnos horarios.
Sensibilización
El delegado local del Banc d’ Aliments, Jaume Roca, lo ha recordado. "Falta poco más de una semana pero es muy importante tener los voluntarios con días de antelación para que toda la cadena se pueda desarrollar con la máxima comodidad". Roca comentó que en este momento, la delegación local cuenta con 350 personas inscritas pero enfatizó que se necesitan más del doble de esta cifra. "Nos gustaría llegar de nuevo a los 944 del año pasado porque ello nos permitió una muy buena organización. De ahí que sea tan necesario hacer este reclamo y sensbilizar a las personas para que cooperen".
El delegado local hace este llamamiento con antelación. En este sentido rememoró que el año pasado hubo mucha inquietud porque llegaba el día D y faltaban muchos voluntarios. El mensaje se publicitó con insistencia -en ello se emplearon a fondo los organizadores de los bancos solidarios- y dio un resultado que desbordó las previsiones iniciales. Y es que el Gran Recapte es posible gracias a la colaboración desinteresada de miles de ciudadanos que dedican su tiempo durante el fin de semana. Las personas que quieran cooperar pueden inscribirse en la página web del Gran Recapte y en el apartado sobre el voluntariado. Una vez realizada la solicitud, la delegación se pone en contacto con la persona para acordar el modo de participar. Los voluntarios deben cubrir un turno de 3 o 4 horas durante los días de la campaña en el punto de recogida que hayan elegido. Tendrán como punto de apoyo y referencia a un coordinador, el cual tendrá acceso al email y teléfono móvil de los miembros de su equipo para poder trabajar conjuntamente. Todas las personas que quieran hacer de voluntarios y coordinadores que hayan participado en ediciones anteriores, deben inscribirse de nuevo, ya que el Banc d’Aliments de Catalunya no guarda registros de años anteriores. Los voluntarios inscritos no pueden ser coordinadoresy viceversa. Un voluntario se puede apuntar a más de un punto de recogida y a más de un turno, pero no es posible apuntarse en el mismo turno en más de un sitio. En esta edición del Gran Recapte de Terrassa está previsto que colaboren 59 establecimientos, entre cadenas, supermercados y tiendas de alimentación. Roca se mostró satisfecho porque supone que se ha ganado tres o cuatros puntos de recogida con respecto al año pasado.
El Gran Recapte d’Aliments de 2017 consiguió 4.656.000 kilos en más de 2.500 puntos de recogida y con la ayuda de más de treinta mil voluntarios. El banco espera para esta edición contar con la necesaria colaboración de voluntarios y donantes para hacer posible esta gran acción de ayuda a los más vulnerables de nuestro entorno. La campaña para atraer voluntarios tiene su punto álgido los días del Gran Recapte pero después también se necesitan personas para ayudar a clasificar los alimentos. Terrassa, como el año pasado, hará esta tarea en el Recinte Firal de Terrassa, a partir del día 2 de diciembre. Una vez clasificado se hace la cesión a las entidades del tercer sector, como el Rebost, y otras para la distribución a las familias.