El Consorci per a la Gestió de Residus del Vallès Occidental lanza una nueva campaña para el fomento del reciclaje en la que interpela directamente a la ciudadanía que sigue sin separar los residuos en casa. Bajo el lema “Excusas o reciclas?, la iniciativa pretende convencer a aquellos que se resisten a reciclar o lo hacen de manera incorrecta y para ello recurre a personajes conocidos e “influencers” para que conviertan el mensaje en viral.
La presentación de la nueva campaña tuvo lugar ayer en el plató número 4 del Parc Audiovisual de Catalunya, donde se mostraron los elementos de esta iniciativa global de concienciación que engloba diferentes aspectos del reciclaje y que se centra sobre todo en fracciones como la materia orgánica, los envases, el papel y el cartón, el vidrio y el derroche alimentario.
Durante 5 meses, se difundirán imágenes en las que se pretende que quienes no reciclan se sientan aludidos al observar, por ejemplo, La Mola rodeada de basura, comida lanzada al contenedor o aceite de cocina vertido a la bañera.
La campaña saldrá a la calle con una exposición sobre el plástico y un punto informativo sobre residuos que recorrerá la comarca y que en Terrassa pasará por el Mercadal de los miércoles. También programa un “escape room” que llegará a las escuelas y al Saló Juguem y organiza un concurso en el que se invita a las escuelas a grabar vídeos de 40 segundos sobre cómo aprovechan los restos de comida.
Además, la iniciativa programa un Festival Street Art con graffitis sobre el tema en distintas localidades de la comarca y pone a disposición de la ciudadanía el teléfono 656893709 como whatsapp de consulta las 24 horas.
Pagar y colaborar
A la presentación de la campaña “¿Excusas o reciclas?” en el Parc Audiovisual acudieron ayer Josep Maria Tost, director de la Agència Catalana de Residus; Ignasi Giménez, presidente del Consell Comarcal del Vallès Occidental; Alfredo Vega, alcalde de Terrassa y Ricard Torralba, presidente del Consorci de Residus, entre otras autoridades.
Alfredo Vega explicó que “ya no hay excusas frente a la necesidad de cuidar el medio ambiente” y que estamos ante un “cambio cultural” que pasa porque el ciudadano colabore y entienda que, para que la recogida y el tratamiento de los residuos sea sostenible, “hay que pagar y también colaborar”.
Josep Maria Tost puso el acento en la necesidad de separar la orgánica porque “cada kilo son dos kilos de CO2”. El director de la Agència de Residus anunció una “fiscalidad más justa en la que pague más quien menos recicla y más contamina”.