Versos del psicoanalista alemán Eric Fromm (el padre del tratado "L’art d’estimar") y del escritor Federico García Lorca fueron ayer compañeros de viaje de la psicóloga, Vera Santos, en la conferencia marco que impartió sobre el proceso de duelo a causa de la pérdida de una persona, una mujer, por fallecer en manos de su expareja o pareja. Los poemas de Fromm y García Lorca emocionaron como también conmovió el relato de Santos quien, para su exposición, referenció un caso real, el de Fernando, casado con Lucía, padres de Julia que habían perdido a su hija tras ser asesinada de forma muy violenta por su compañero un 6 de mayo de 2012. La psicóloga personalizó todo el proceso de acompañamiento en Fernando, su paciente, roto por el dolor, así como todo el tramiento terapéutico que se desarrolló en paralelo. En el prólogo definió el duelo como "el precio que se paga por amar" y retomó el significado a la invesa, al final, cerrando el círculo al decir que "el amor ayuda a superar el duelo". Santos habló de modelos para abordar casos como el que vivió Fernando y que provocan un golpe terrible en el seno familiar. Referenció el modelo de Alba Payàs que se compone de cuatro dimensiones: trauma, protección, integración y crecimiento. Señaló que el padre de Julia pasó por los cuatro estadios y en cada uno de ellos detalló cómo lo vivieron de forma conjunta.
La psicóloga explicó que en la primera dimensión aparecieron múltiples sensaciones; desde la incredulidad y la insensibilidad hasta el aturdimiento, las crisis de pánico, el insomnio, las imágenes intrusivas, la culpabilidad, las obsesiones, la venganza… "Todo ello vivía en un único cuerpo por lo que tuvimos que priorizar que este cuerpo pusiera en orden su sistema nervioso tan alterado".
Al cabo de un tiempo, terapeuta y paciente abordaron la fase de protección en la que la primera consideró esencial la empatía. "Hay cosas que no se pueden extinguir como el dolor y la rabia que guarda el paciente pero hay que ponerse en su piel porque, de lo contrario, el paciente abandona". Llegó después el periodo de la integración en la que Fernando logró discernir sobre los sentimientos positivos y negativos. "El dolor sigue presente, es indescriptible, pero es un dolor más centrado ya en la pérdida de la hija, de su ausencia, de su recuerdo, del amor que sentía por ella". De ello supimos en algunas cartas de Fernando para su hija ausente y que Santos leyó con un respeto y delicadeza absoluta.
Y el paciente entró después en la etapa del crecimiento y en la misma consideró que le ayudaría participar en proyectos contra la violencia de género. Y así fue. Fernando optó por ser testimonio y se implicó en proyectos contra la violencia de género en escuelas de primaria y secundaria. Y lo hizo para superar el duelo y, sobretodo, por amor a su hija".
Sumar esfuerzos
En la apertura de la jornada, enmarcada en la campaña municipal del 25-N, el alcalde Alfredo Vega y la directora del Institut Català de la Dona, Núria Balada, subrayaron la necesidad de sumar todos los esfuerzos posibles para erradicar este fenómeno. "Este es un tema -dijo Vega- que debe estar en todas las agendas públicas y privadas. Nos indigna y nos horroriza porque cada agresión y asesinato arrastra una historia de dolor. Hay que crecer en conciencia social y continuar trabajando". Balada, por su parte, también puso énfasis en las alianzas. "Hay que tejer redes entre las administraciones y entidades para hacer visible aquello que ha sido invisible durante años". Vega y Balada estuvieron acompañados por la concejal de Políticas de Género, Gracia Garcia.