Llegaron a las siete de la mañana y se marcharon un par de horas después con un detenido. Agentes de la Guardia Civil irrumpieron ayer en una vivienda de la calle de Prat de la Riba, en Vallparadís, y desplegaron un llamativo dispositivo de seguridad durante una operación desarrollada en varias ciudades. Apenas trascendió el motivo del despliegue, pero algunas informaciones apuntaron a una investigación de blanqueo de capitales desarrollada en Terrassa, en Tarragona y media docena de provincias.
“Han reventado la puerta del piso”, dijo un vecino poco después de la marcha de los agentes. Habían arribado en una decena de vehículos a las siete de la mañana. Algunos guardias permanecieron vigilantes, pertrechados con armas largas, en la esquina de la calle de Prat de la Riba con la de Urquinaona. Había retenciones de tráfico en la primera calle, hacia el paseo del Vint-i-dos de Juliol, y algunos conductores empezaban a difundir mensajes con la nueva: varios furgones de la Guardia Civil estaban aparcados en Prat de la Riba.
Los agentes habían entrado en un cuarto piso de un bloque de veintidós viviendas ubicado entre la calle de Urquinaona y el paseo del Vint-i-dos de Juliol. Allí vive un hombre con su esposa y su suegra, según el vecindario. Sus dos hijos, ya adultos, están emancipados. “Viven en Tarragona”, contó un conocido de la familia a este diario.
En Tarragona se realizaron otros registros durante la mañana de ayer. Al menos, tres, según publicó Diari de Tarragona, en información de la agencia ACN, en su edición digital, que aludía a la parte del operativo llevada a cabo en Terrassa y otras localidades españolas. La misma información refería que la macrooperación estaba relacionada supuestamente con el amaño de partidos y las apuestas ilegales y que los registros en la ciudad tarraconense se vinculaban a presunto blanqueo de capitales.
Los guardias salieron del bloque de pisos con un detenido, un hombre que, según vecinos, llevaba dos décadas residiendo en la finca, sin dar motivos para la sospecha. El dispositivo policial y su resolución constituyeron una sorpresa mayúscula.