El grupo municipal de Terrassa en Comú lleva al pleno de septiembre una propuesta de resolución que busca extender el derecho a la igualdad al ámbito del deporte a través de un reparto equitativo de los recursos públicos. La formación explica que actualmente el 79 por ciento del presupuesto municipal para actividad deportiva lo reciben hombres y que ellos copan el 81 por ciento de los usos deportivos en los equipamientos municipales.
No es que las mujeres no hagan ejercicio físico, es que "hay una sobre financiación de los deportes masculinizados como el fútbol, el atletismo o el baloncesto, frente a los feminizados", explica la concejal Anna Rius, que recuerda que las prácticas con mayoría de mujeres como la zumba, el yoga o el patinaje no tienen oferta pública y gratuita y comportan el pago de una cuota en un club o en un centro privados.
Los comunes sostienen que, pese a que la mujeres realizan menos ejercicio físico que los hombres, "la ciudad no desarrolla políticas para combatir esta desigualdad" y propone un paquete de medidas para revertir la situación.
La propuesta incluye el compromiso del equipo de gobierno de distribuir de manera paritaria los recursos que destina a financiar las entidades deportivas, las actividades y el uso de los espacios públicos deportivos. También estudiar la posibilidad de realizar sesiones cardiovasculares de yoga, zumba, pilates, marcha nórdica y otras actividades, gratuitas o de bajo coste, en las instalaciones públicas de la ciudad. La medida incluye la posibilidad de que, allí donde no se pueda programar, se explore la via de acuerdo con centros deportivos privados.
Para corregir el desequilibrio en la financiación de las actividades físicas practicadas por una mayoría de mujeres, TeC pide que aspectos como el número de usuarias de una entidad y la promoción que ésta haga de la actividad deportiva entre las mujeres puntúen en los procesos para la concesión de ayudas.
"El Ayuntamiento de Terrassa puede hacer políticas valientes -comenta la concejal Anna Rius- pero tanto o más importante es que las entidades y sus juntas directivas sean cómplices de este cambio de paradigma". La concejal plantea la necesidad de "repensar el concepto de ‘deporte serio’. Cuando se propone financiar la zumba -apunta- la reacción suele ser de perplejidad. ¿Por qué? Es menos seria esta práctica porque la hacen las mujeres. Todos deberíamos reflexionar sobre ello".
TeC no quiere que la propuesta se vea "como una imposición, porque es una cuestión de justicia. El deporte no es solo competición. El deporte es salud y el objetivo debe ser la salud pública".
Para abordar el tema desde el conocimiento de los datos, TeC insta al ejecutivo a realizar una encuesta sobre hábitos deportivos y actividad física de hombres y mujeres en la ciudad, dando así cumplimiento a la propuesta por la visualización del deporte femenino de competición aprobada en marzo de 2017 e impulsada por este gru- po político.
