La demanda de beca para el servicio de comedor escolar sigue creciendo y, en consecuencia, aumenta también el número de alumnos beneficiarios de esta prestación. El Govern ha adjudicado un total de 3.828 ayudas, lo que representa 560 más que el curso anterior y un 77 por ciento de las solicitudes cursadas (4.964) por las familias antes del verano.
De este número de becas concedidas hay 177 (cinco por ciento) que cubren el coste total del menú mientras que hay 3.651 (95 por ciento) que están subvencionadas al cincuenta por ciento. Un curso más el Ayuntamiento compensará la demanda con las becas de Shers, la empresa adjudicataria del servicio del comedor en la red pública. Shers complementa hasta el cien por cien a un millar de alumnos. La radiografía, final, pues es que habrá 1.177 becas que financiarán el coste total del menú y 2. 651 que lo harán en un cincuenta por ciento.
Los datos, facilitados por el Ayuntamiento, son provisionales en la medida que la convocatoria de solicitudes de becas está abierta durante todo el curso escolar. En este sentido decir que el número de ayudas podría incrementarse a tenor de que hay 322 peticiones que están por resolver. El resto de las solicitudes (814) son las denegadas a priori.
El servicio de ayudas al comedor escolar sigue creciendo. El número de becas adjudicadas para este curso es de 3.828, lo que representa 560 que el curso anterior (3.268). Y, en consonancia, el Govern ha aumentado también el número de beneficiarios y también el número de becas que cubren el total del coste.
Así el curso pasado había un 97 por ciento de los adjudicatarios con becas del cincuenta por ciento y un tres por ciento con becas del cien. Este curso ha disminuido ligeramente el número de beneficiarios en dos puntos con ayudas del cincuenta por ciento y se ha incrementado en el mismo porcentaje el de beneficiarios con ayudas del cien por cien.
Cabe señalar también que la gran mayoría de becas solicitadas y adjudicadas se concentran en el alumnado de infantil y primaria (93 por ciento) mientras que para el de secundaria representan un tres por ciento y para el alumnado con discapacidad, un cuatro por ciento.
Vulnerables
El aumento de las becas comedor sigue siendo un tema de atención para el Ayuntamiento y el Consell Comarcal del Vallès Occidental. El alcalde de Terrassa, Alfredo Vega, se mostró preocupado por " el incremento de solicitudes (un 6,8 por ciento) y porque el Govern, en base a la normativa, concede muy pocas ayudas del cien por cien".
Todo ello viene a confirmar que la situación de vulnerabilidad de muchas familias con hijos en edad de escolarización y que quizás sería bueno revisar los criterios de la adjudicación. Sobre ello se ha pronunciado abiertamente el presidente del Consell Comarcal, Ignasi Giménez, quien ha manifestado que "los datos en la comarca (se han concedido 13.789 becas y el 95 por ciento solo sufragan la mitad del menú) demuestran una vez más la situación de pobreza que viven muchos hogares y la gran cantidad de niños que viven con riesgo social".
Giménez ha recordado que "seguiremos trabajando para poder garantizar las comidas de las familias más vulnerables y buscaremos la implicación del departamento de Ensenyament para abordar también una solución para las becas del alumnado de secundaria". Cabe recordar aquí que el Consell d’Alcaldes de la Comarca ya acordó en su día incidir sobre el decreto de adjudicaciones y especialmente implantar medidas para dar cobertura en secundaria, puesto que los alumnos que acaban 6º de primaria y son becados llegan a la ESO y ya no lo están.
Comedores en la ESO
La causa hay que buscarla en que la enseñanza secundaria pública cambió horarios y concentra la jornada lectiva hasta el mediodía. En esta tesitura, los centros no cuentan con servicio de comedor y, por tanto, los alumnos tienen que regresar a casa. Para paliar esta situación han surgido iniciativas que han permitido adecuar un espacio de comedor y que haya alumnos que puedan beneficiarse. Terrassa ha sido una de las ciudades pioneras en cubrir esta necesidad. El primer servicio de comedor se abrió en el Institut Mont Perdut de Les Arenes y después se sumaron Cavall Bernat, Santa Eulàlia y Nicolau Copèrnic.
En el primer centro y en el segundo, el servicio está gestionado por Creu Roja y acoge cuarenta alumnos, veinte en cada instituto. En el INS Santa Eulàlia, el programa está a cargo de la Associació Educativa Can Palet y Probitas , y cuenta con 40 alumnos y en el INS Nicolau Copèrnic, el servicio está impulsado por el Consell Comarcal y Probitas y acogerá a 40 alumnos.
Cabe remarcar también que estos servicios van más allá de ofrecer un servicio de comedor. El objetivo principal es garantizar la comida del mediodía pero se complementa con actividades socioeducativas. Precisamente de ello parece haber tomado nota el departamento de Ensenyament, a tenor de las declaraciones del director de Serveis Territorials, Jesús Viñas, cuando hizo referencia a que el servicio del comedor debe ir unido a un proyecto socioeducativo. Viñas matizó también que "es un tema muy complejo porque intervienen muchos agentes y factores" y adelantó que "nos llevará toda la legislatura".