El curso político arranca en Terrassa con uno de los temas más polémicos y sensibles de la legislatura. El Consistorio se fue de vacaciones tras la grave crisis del servicio de limpieza de finales de junio y principios de julio, con la imagen de contenedores desbordados y trastos en las calles. Los grupos políticos regresarán la próxima semana con un pleno extraordinario sobre la mesa.
Terrassa en Comú y ERC-MES ya han formalizado la petición de la sesión monográfica, que proponen para el 20 de septiembre. Sus diez concejales garantizan la convocatoria, pero será el gobierno quien fije la próxima semana la fecha de celebración. Si se quiere que la sesión extraordinaria dé buenos resultados, sugieren TeC y ERC-MES, el 20 de septiembre "da margen a los grupos para aportar mejoras" y permite "no posponer más un debate imprescindible".
La oposición acudirá al pleno extraordinario para debatir "cómo se han hecho las cosas, pero sobre todo cómo deben hacerse". El objetivo de los convocantes es "desbloquear" la situación y conseguir que el gobierno municipal apruebe un contrato programa con la empresa municipal Eco Equip que regule sus funciones, los servicios que debe prestar y un plan de objetivos. Del pleno extraordinario debe salir un compromiso de aprobación del nuevo plan de residuos, cuyo avance de plan se aprobó en 2015, y que debe marcar las líneas de acción y las prioridades hasta 2020.
El objetivo es alcanzar un acuerdo "lo más amplio posible" para "la mejora de la limpieza en la ciudad, para reducir el coste de la gestión de residuos y romper el estancamiento del reciclaje". En Terrassa la recogida selectiva se situó el año pasado en un 34,96%, dos puntos por debajo de la media vallesana (36,71%), a cinco de la catalana (39,9%) y a años luz del objetivo del 60% fijado por Europa para 2020. En la salida de la crisis la ciudad consume más, genera más residuos, pero parece haber tocado techo en recogida selectiva.
En ese contexto, la oposición opina que la gestión política del servicio de limpieza y recogida de residuos "ha sido nefasta", "incluso negligente", y que ha estado caracterizada por "el incumplimiento sistemático de compromisos" y "la incapacidad" para mejorar la situación. El gobierno, dicen , actúa reactivamente. "Parece haber despertado del inmovilismo" a partir del anuncio, el pasado mes de junio, de la voluntad de ERC-MES y TeC de convocar un pleno extraordinario sobre la limpieza viaria y la gestión de los residuos en la ciudad. Ambas formaciones recuerdan que el ejecutivo estrenó mandato con el objetivo de innovar en aspectos de limpieza, pero en la recta final de la legislatura "el problema se ha agravado".
Un plan de 20 millones anuales
El pleno extraordinario convocado por TeC y ERC-MES permitirá debatir en sesión plenaria y por primera vez públicamente el estudio que ha sido encargado por el ejecutivo municipal sobre el futuro del servicio.
En su informe preliminar, el documento concluye que Terrassa necesita destinar 20,6 millones anuales al servicio para ser una ciudad limpia. El presupuesto municipal consigna actualmente 15,4 millones a residuos y limpieza viaria, de manera que serían necesarios cinco millones más cada ejercicio. Además, el estudio propone invertir 23,8 millones, a amortizar en varios años, en adecuar la plantilla y la flota de Eco-Equip a las necesidades de Terrassa,
En septiembre, el ejecutivo de Alfredo Vega tiene prevista una reunión de trabajo en la que se hará una segunda lectura del informe, que ha ajustado algunos parámetros a indicadores reales de la ciudad. La oposición, que tuvo acceso al documento antes de vacaciones, ve en el estudio una evidencia más de que la ciudad necesita mayores recursos y mejor gestión para salir de la situación actual y mejorar los indicadores de limpieza y residuos.