Terrassa

Danza, música y gegants de Terrassa se mostraron en las calles de Perpinyà

La "gran fiesta mayor de la cultura catalana", esto es, la "Diada d’Adifolk a Perpinyà" (DAP) se desarrolló el viernes y el sábado en la capital de la Catalunya Nord tal como estaba prevista, con una gran participación y una notable presencia de terrassnses en los actos. Ya la hubo en el concierto -coral, de cobla y de sardanas- que el viernes por la noche inauguró este festival en la catedral de Perpinyà, en el que Oyuna Baturova -artista terrassense originaria de la república rusa de Buriatia- cantó "El cant dels ocells" como solista, acompañada al violín por la directora musical de Adifolk, Laia Giralt. Una ceremonia de apertura que tuvo como presentadores a dos terrassenses, Oriol Ramírez, que desarrolló sus intervenciones en catalán, y Montse Domper, que las hizo en francés.

El sábado, una sucesión de retenciones de tráfico retrasó la llegada de la expedición del Esbart Egarenc del Social hasta la hora de comer. De modo que, contrariamente a lo anunciado, no pudieron participar en la "Plantada de l’Imaginari" prevista a las nueve de la mañana en el Palau de Congressos, ni en la triple cercavila que a partir de las once recorrió las calles y plazas del centro histórico. Sí lo hizo la Colla Gegantera de les Fonts, que desplazó unos treinta integrantes, y sus dos figuras más nuevas. Na Falguera y Corbera, "els gegants pagesos", en una de las más relevantes salidas de la historia de etra colla creada en 2008.. Al final de la cercavila, entraron en la plaza del Castellet con su canción y danza propios, "Pipo".

A las cuatro de la tarde, en el ayuntamiento de Perpinyà, tuvo lugar la recepción institucional a los grupos participantes. En ella, la formación musical terrassense La Corranda interpretó el tema "Canó de Palamós". El acto contó con la presencia del concejal del distrito III de Terrassa, Jordi Rueda, desplazado a Perpinyà para la ocasión.

"Gitanes de Rubí" en el Castellet
Tras la cercavila y muestra "bastonera" de la tarde -la DAP destacaba este año el ámbito de los "bastoners", sin que participara ningún grupo terrassense- tuvo lugar, ante el Castellet, la "Mostra de dansa catalana", protagonizada por el Esbart Egarenc del Social. Interpretaron los montajes "Gitanes de Rubí" y "A València, festa", íntegramente con la música en directo de la célebre cobla Mil·lenària – Fidelíssima Vila de Perpinyà y despertando un gran interés del númeroso público. Entre ambas piezas, mientras se cambiaban el vestuario, actuó el Ball d’Espases de Salou.

También ante el Castellet, a las 9.30 de la noche, el grupo terrassense La Corranda (Oyuna Baturova, Toni Marbà, Oriol Ramírez y Josep Noguera, que substituía por esta ocasión al titular Ricard Segura) ofrecieron un concierto de habaneras. Durante la interpretación de "La xalana", que toma su nombre de una barca, una persona se paseó entre el público con una de pesca a modo de "capgròs", y volvió a hacerlo cuando "La bella Lola", repartiendo además pañuelos para que los espectadores los agitaran al ritmo de esta conocida habanera.

Justo cuando acababa el concierto de La Corranda, comenzaba el espectáculo de fuego a cargo de cuatro grupos de "diables". Y la última pieza, que fue una versión de "País petit" de Lluís Llach, la interpretó en solitario Oyuna Baturova, mientras los "diables" hacían ya estallar sus surtidores de fuego. La DAP 2018 finalizaría con un baile folk que se prolongó prácticamente hasta la medianoche.

Oriol Ramírez, que además de cantante de La Corranda, y presidente de la Colla Gegantera de les Fonts, es miembro de la junta de la Associació per a la Difusió del Folklore (Adifolk), hace un balance muy positivo de esta segunda diada de la DAP. "El Ayuntamiento de Perpinyà ya ha confirmado su total disposición para acoger otra edición el próximo año", señala.

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