El departament de Territori i Sostenibilitat impulsa la licitación de la esperada ampliación de la autopista C-58, una de las infraestructuras viarias de Catalunya que soporta mayor presión y congestión de tráfico, con más de 54 mil vehículos diarios a la altura de Terrassa. Las obras saldrán a concurso público por un importe global de 31,6 millones de euros y corresponden a los tramos entre Sabadell y Terrassa, en dirección a Manresa, y entre Terrassa y Badia del Vallès, en sentido Barcelona.
Territori inició el martes la licitación, por valor de 17 millones de euros, de los 4,5 kilómetros de enlaces que se construirán en el tramo Sabadell y Terrassa, dirección Manresa. Las máquinas iniciarán los trabajos a principios de 2019 y se prevé una duración de 15 meses, de manera que el tramo podría entrar en funcionamiento a mediados de 2020.
El proyecto de ampliación de la C-58 adopta diferentes soluciones técnicas en función de las características de cada tramo. Los 4,5 kilómetros de intervención entre Terrassa y Sabadell, dirección Manresa, abarcan los 4,5 kilómetros entre el enlace con la Ronda Oest de Sabadell y la salida de Can Parellada, en Terrassa.
El proyecto persigue ampliar la calzada a cuatro carriles para mejorar los accesos y las salidas y así descongestionar el tronco central de la autopista. A la altura de la Ronda Oest, esa ampliación facilitará los cruces de vehículos que se dirigen a la salida. Más adelante, se habilitará una calzada lateral de dos carriles que distribuirá los movimientos de entrada y salida a la autopista.
El proyecto debe contribuir de manera drástica a la descongestión de la autopista en este punto, por el que circulan unos 44 mil vehículos diarios. Se calcula que la mitad de ellos, unos 22 mil, transitan en dirección a Terrassa y Manresa. Son los candidatos a utilizar la nueva calzada lateral, que liberará el tronco central, por el que acabarán pasando 26 mil vehículos diarios.
En este punto, la obra contempla diversas actuaciones en los enlaces para facilitar las nuevas conexiones.
En la salida de Can Parellada, la calzada lateral de dos carriles mantendrá su formato hasta el enlace con la riera de Les Arenes, donde se ampliará a tres carriles durante un breve tramo de 300 metros. Para cruzar la riera de Les Arenes, está prevista la construcción de un nuevo viaducto de 128 metros que discurrirá en paralelo al tronco central de la autopista y que resolverá las entradas y salidas al área de servicio, así como las entradas y salidas a la avenida del Vallès, tanto en sentido Norte como Sur.
Además, está previsto reordenar los accesos a los polígonos industriales de Can Parellada, Santa Margarida, Terrassa Est y también a la carretera de Rubí.
A la altura de Sant Quirze, se modificará el actual ramal de entrada desde la Ronda Oest de Sabadell y la siguiente salida, el enlace de Sant Quirze en el kilómetro 15,4. En este punto se mantendrán tres carriles en el tronco central y uno para los cambios de carril y para las entradas y salidas. Las obras permitirán trasladar el actual ramal de conexión con el enlace de Sant Quirze Norte y modificarán el paso elevado que cruza al otro lado de la autopista.
Dirección Barcelona
La segunda intervención afecta a uno de los tramos más colapsados de la C-58, el que origina retenciones constantes a la altura del kilómetro 17, en dirección Barcelona. Por este punto circulan cada mañana una media de 30 mil vehículos por la calzada central procedentes de Terrassa y Manresa, a los que se suman 20 mil vehículos más procedentes de los accesos de Terrassa Este, Rubí, Les Fonts y los polígonos industriales.
La solución que se aplicará a este tramo pasa por la ampliación de la calzada central, que pasará a tener tres carriles hasta enlazar con el tercer carril ya existente a la altura de Sabadell Centre. Paralelamente se creará un cuarto carril de trazado discontinuo que facilitará las maniobras de entrada y salida a la autopista.
Territori i Sostenibilitat licita conjuntamente este tramo entre Terrassa y Sant Quirze con, más adelante, la reforma del nudo de Sant Pau y el enlace de la C-58 con el eje de la B-30 y la autopista AP-7 (ver despiece). Las obras correspondientes a la ampliación de la autopista en este recorrido global desde Terrassa hasta Badia suponen una inversión global de 14,6 millones de euros.
Josep Rull
La ampliación de la C-58 fue uno de los primeros proyectos que impulsó el ex conseller Josep Rull en 2016, nada más incorporarse al cargo. El político egarense anunció entonces que la falta de recursos impedía abordar una ampliación global, de manera que proyectaría tres tramos estratégicos que ayudarían a descongestionarla. Rull cumple en estos momentos prisión provisional en Estremera, desde donde sigue de cerca el avance de los proyectos prioritarios de su mandato político.