Una cocina portátil de gas butano se incendió el sábado en un piso de la calle de Romania, en el barrio de Can Parellada, y quemó una campana extractora. Y causó quemaduras en las manos a un hombre de 63 años, que además resultó intoxicado por inhalación de humo. Una mujer de 49 años sufrió una crisis de ansiedad. La humareda dañó el resto de la cocina.
Los bomberos supieron del incendio a las 2.13 de la tarde. El fuego ya estaba apagado cuando llegaron los efectivos de Bombers de la Generalitat, que remojaron la estancia y ventilaron la vivienda. Los dos afectados fueron evacuados a centros sanitarios.
Otro incendio sobresaltó a vecinos del barrio de Sant Pere Nord el domingo. A las 7.20 de la mañana llegaron las alertas a los bomberos y la Policía Municipal. En esta ocasión no hubo personas heridas ni intoxicadas.
Un calentador
El incendio se declaró en un calentador de gas y quemó la instalación de una bombona. Algunos vecinos del bloque bajaron a la calle. A otros los bomberos les instaron a permanecer en sus viviendas.
Cuatro dotaciones de bomberos trabajaron durante una hora en la extinción del fuego y la inspección de la instalación dañada, que experimentó una pequeña fuga sin consecuencias.