Joana Carré Pons y Miquel Martínez Villanueva, vecinos de Ca N’Aurell e implicados desde siempre en la dinamización del barrio, han recibido este mediodía de domingo el título “padrins” de la Festa de la Santa Creu i l’Arbre Maig celebrada en la Sagrada Família. El reconocimiento ha tenido lugar en los locales de la parroquia y ha puesto casi el punto final a una celebración tradicional y popular que se lleva a cabo de la década de los cincuenta (1952).
Los homenajeados han sido obsequiados, de manos del alcalde Alfredo Vega y de representantes del Esbart Terrassa de l’Agrupació Amunt i Crits, con un ramo de flores y el plato conmemorativo de la entidad folclórica catalana.
El homenaje ha sido el momento más emotivo de una fiesta que este año, por la lluvia, ha tenido que trasladarse al interior del recinto parroquial. Ello no ha sido obstáculo para que la organización, Amunt i Crits, pudiera llevar a cabo el programa previsto casi al completo. Se ha suspendido el cercavila al aire libre pero los grupos de cultura popular han hecho sus exhibiciones en el local y han sido premiados con fuertes aplausos de los asistentes.
El momento más esperado ha sido la interpretación del “Ball de la Coca” de Ca N’ Aurell donde los “dansaires” han bailado con el dulce al ritmo de la música del grupo Musikària.
La fiesta ha finalizado con la bendición de la “Creu del Terme” a cargo del mosén de la Sagrada Família, Josep Maria Esplugues y ante la presencia de las autoridades y homenajeados. A continuación se ha celebrado la misa y durante la misma se ha dado entrada a los gegants para que ofrecieran su baile.
