La escritora terrassense Júlia Prunés, especializada en educación emocional, es la autora del libro de cuentos de la 37 edición del Concurso de Dibujo Infantil, promovido por la Fundació Antigues Caixes Catalanes (FACC) y BBVA. Sus personajes e historias han inspirado a los escolares participantes en este certamen (ver información adjunta) en asuntos tan trascendentales como la convivencia, la diversidad y la discriminación, los prejuicios y cómo salvar a los más pequeños para vivir en un mundo más justo y solidario. Son las reflexiones que Júlia Prunés (que también se dedica a hacer talleres para niños y niñas, charlas para padres y madres y formación para maestros) introduce en sus textos para que sean motivo de análisis en las escuelas de Catalunya.
¿Cómo valoras la iniciativa de la FACC y el BBVA con este concurso de dibujo infantil?
Lo valoro muy positivamente, primero porque promueve la expresión plástica de los niños y las niñas a la vez que la lectura, tan necesario en una era tan tecnológica como la nuestra. Y, en segundo lugar, porque con ello, aporta recursos para la educación emocional, a las escuelas y contribuye en el crecimiento personal de nuestros niños y niñas.
¿Realmente les llega el mensaje a los niños?
Parece que sí! De vez en cuando recibo algún comentario de maestras con anécdotas de sus alumnos y también me cuentan proyectos que llevan a cabo, inspirados por alguno de mis cuentos. Cuando me encargaron los seis primeros, propuse crear un espacio en la red con material para trabajarlos en la escuela, y nació el blog www.contesperaprendreaser.blogspot.com. Para mi es un honor, descubrir que lo utilizan y les funciona.
¿Qué supone para ti inspirar a los escolares en valores que son tan esenciales para su formación?
Llevo tres años escribiendo para el concurso y para mi siempre supone un honor y un privilegio que me permitan entrar en su día a día a través de mis personajes y mis cuentos y, si además, les inspira y les ayuda a crecer, ya es€ imposible de describir en palabras.
¿Cómo y por qué elegiste los argumentos y personajes de los diferentes cuentos? ¿Por su sencillez? ¿Por su valor pedagógico?
Digamos que ellos me eligen a mí€ No sabría explicar muy bien como funciona esto de la inspiración, pero resulta que un día aparece el argumento en mi cabeza y a medida que voy escribiendo, van apareciendo los personajes. Mi trabajo está en encontrar las palabras para contarlo y darle forma para llevarlo al campo de la educación emocional.
¿Cuál es la clave de una buena educación emocional?
Empieza por poner nombre a las emociones. Darnos cuenta de lo qué sentimos es el primer paso para poder gestionarlo. Conocerse y amarse a uno mismo o a una misma es fundamental para ser feliz, empatizar y crear vínculos saludables con los demás. Y, finalmente, disfrutar de habilidades sociales cómo la escucha activa, la asertividad, una buena gestión de los conflictos€ nos llevaran a vivir en paz y a mejorar la convivencia.
¿Es una asignatura pendiente para muchas familias?
Las familias hacemos todo lo que podemos con lo que sabemos. Más que una asignatura pendiente, realmente creo que quizá nos convendría tener más espacios de reflexión y aprendizaje, y también para compartir con otras familias. En nuestra sociedad, todo va muy rápido y casi no tenemos tiempo para parar y pensar entre nosotros. Y es muy necesario. Antes ni se hablaba de todo esto, ahora cada día lo tenemos más presente€ ¡estamos en ello!
¿Y, para el próximo año, de qué van a tratar los 6 cuentos del concurso?
Para la próxima edición, ya estoy trabajando en “6 cuentos de vida”, en los que vamos a tratar temas vitales como el amor, la vida, la muerte y la familia.