Derechos y democracia. Ese será el eje sobre el que girará el Parlament Ciutadà, que llegará mañana a su segunda edición y que se celebrará a partir de las 9.30 en el centro cívico President Macià. Hace poco más de un año se llevó a cabo el primero. Y ayer, el Consell d’Entitats d’Acció Ciutadana presentó el segundo, de larga gestación (con dos jornadas previas de debate) y de propósito ejecutivo. Sus impulsores no quieren emitir declaraciones ni solamente aprobar mociones, que también. Sobre vivienda, sobre pensiones, sobre sanidad, sobre educación, Quieren que lo que salga del parlamento ciudadano llegue al pleno municipal "para que la ciudadanía tenga poder decisorio real, más allá de los organismos meramente consultivos".
Se hablará y se decidirá "sobre el derecho a una vivienda digna" después de años de unas políticas "no bien encaminadas a conseguir un parque de viviendas sociales para personas vulnerables", como apuntó ayer Valeria Santiago, representante de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) y de la Alianza contra la Pobreza Energética (APE). Se presentará, pues, una moción sobre el derecho a techo y sobre medidas de emergencia en este ámbito y en el de los suministros básicos. Y se hablará y se decidirá sobre las listas de espera, y sobre la salud mental, uno de los ámbitos sanitarios peor atendidos y cuyo nexo con la crisis no puede ser soslayado, como indicó Jaume Pavia, de la Plataforma en Defensa de la Sanitat Pública de Terrassa-Marea Blanca. Y cómo orillar la educación en una de las ciudades de Catalunya "con más segregación escolar", añadió Puri Carmona, de la comunidad educativa.
Quien no se haya inscrito podrá participar también si se dirige al centro cívico de Sant Pere Nord. No se topará con trabas, pero es preferible que se haya apuntado, pues el programa es "apretado y ambicioso", en palabras de Dolors Frigola, que ejerció de portavoz de los organizadores en el acto celebrado ayer en el Casal de la Dona.
El lema del parlamento: "Impulsemos la democracia en el marco de los derechos humanos. Aplicación efectiva de la Carta Europea de Salvaguarda de los Derechos Humanos en la Ciudad". Para avanzar "hacia una auténtica democracia" es imprescindible ejercerla desde la ciudadanía, "y con la mirada puesta sobre las acciones de nuestros gobernantes", subraya el consejo organizador antes de lanzar un aviso para navegantes: en el primer parlamento, en enero del año pasado, se asumieron acuerdos sobre la municipalización del agua. Aquello fue un espaldarazo para lo que vino después: en diciembre la gestión del agua será pública.
Calidad democrática
El encuentro servirá para proponer la modificación del Reglamento Orgánico Municipal y del de Participación Ciudadana, para posibilitar la materialización política de mociones y declaraciones; para que no caigan en saco roto. "Sin derechos humanos no existe moral democrática", señaló Frigola. Joan Tamayo, del Espai Drets, habló de "mejorar la calidad democrática" dotando a los ciudadanos de herramientas "no sólo para escuchar, sino también para decidir".
Ese proceso de lucha, dijo, "es imparable" y no se acabará el sábado, a las dos de la tarde, cuando está previsto el final del segundo Parlament Ciutadà. Se espera la asistencia de unas doscientas personas.
