Las previsiones eran para el sábado de mal tiempo y se cumplieron. La lluvia apareció a media mañana y hasta el mediodía no dejó de caer. Los paradistas de la IV de la Fira de l’Oliva de Ca N’Anglada plantaron cara al cielo gris y encapotado y salieron a la calle para exponer sus productos y recibir a sus visitantes.
"A pesar del día poco apetecible para estar al aire libre, la feria fue muy bien. Hay que agradecer a los comerciantes su implicación y su resistencia bajo la lluvia. A media tarde, sobre las cinco, ya se despejó un poco, recuperamos el ambiente y se mantuvo hasta las nueve de la noche", manifestó horas después Raquel Pérez, presidenta de la Associació de Comerciants de Ca N’Anglada.
Con la feria, la plaza de ese barrio y sus alrededores se convirtieron en un gran escaparate de aceitunas y aceite de todas marcas y regiones, así como de productos de alimentación artesanos; desde quesos hasta repostería. La lluvia redujo el número de carpas (de las cincuenta previstas acudieron cuarenta) y alguna actuación al aire libre pero no decayó el ánimo. La gente paseaba bajo el paraguas, compraba y se refugiaba bajo las carpas para conversar y/ o comer un tentempié.
En alguna de las paradas estuvieron el alcalde Alfredo Vega y el teniente de alcalde, Amadeu Aguado, departiendo con organizadores. Ambos lamentaron el mal tiempo pero aguardaron. Tenían compromiso. Debían contribuir a la plantación del olivo -el cuarto- en la plaza de Ca N’ Anglada, zona donde antaño fue tierra de cultivos.
Otros, visitantes en familia, se acercaron hasta la carpa donde había un taller que explicaba la historia del aceite, su valor nutricional y proponía una degustación sensorial. Algunos de los comerciantes repitieron como la Hermandad de Sant José de Abrucena de Terrassa. "El aceite de Andalucía (Abrucena está en esa comunidad) es de los mejores. Tiene un sabor más fuerte que el de Lleida porque las aceitunas se recogen más maduras pero está buenísimo". Así lo constató Raúl Manzanero, de Les Arenes, quien explicó que "suelo comprar este aceite por la relación que tengo con los socios de la hermandad y porque me gusta".
Josep Guasch, del Obrador de Sant Llorenç del Penedès, defendía, por su parte, el de Siurana y Arbeca porque es el que comercializa para su venta. "El extra de Siurana y el arbequino están reconocidos mundialmente". Tránsito Sotos y Joan Carrasco, que compraban el aceite de Arbeca, comentaron que "lo probamos una vez y ya no hemos cambiado. Es muy gustoso". La Fira de l’Oliva, que se clausuró a ritmo de jazz con After Hours Blues Quartet, aún tendrá continuidad esta semana. Como cada año ha puesto en marcha el IV Concurso y Ruta de Tapas que se prolongará hasta el 22 de abril.