"En la década de 1960 se decía que el 600 y la televisión eran los grandes enemigos del teatro y acabarían vaciando las salas. Entonces, en Terrassa, habían tres o cuatro compañías amateurs, y alguna programación. Hoy en día, en que existen muchas más cosas que el 600 y la televisión, como internet, en Terrassa tienen actividad casi treinta compañías amateurs, y hace 44 años que se realiza este concurso", recordó en su intervención el concejal de Cultura, Amadeu Aguado, que cerró, el sábado, en la sala Crespi, la gala de entrega del XLIVè Premi Ciutat de Terrassa de teatro, que organiza el Casal de Sant Pere. Esto es, que en Terrassa, "ciudad teatral por excelencia", en la actualidad el teatro "está más vivo que nunca".
Lo prueba el éxito y la continuidad del certamen, y también el ambiente de la ceremonia que puso el punto final a esta edición y dio como ganador al grupo de la entidad Centre Cultural i Recreatiu de Pineda de Mar (Maresme). Habían concursado con una versión actualizada de la comedia "Cyrano de Bergerac" (1897) de Edmond Rostand, que les valió un total de cinco premios: grupo, director (Maite Ferré), primer actor (Xevi Gómez), caracterización y el de "jurado popular", otorgado por los votos del público asistente (con una aplastante promedio de 9,54 puntos).
El jurado lo tuvo difícil
Jordi Serra y Esther Batlló, del grupo teatral Qollunaka, presentaron un vibrante acto que comenzó con Teresa Casals, presidenta del Casal de Sant Pere y coordinadora del certamen, subrayando la alta calidad de todas las obras. Este año se presentaron unas cincuenta, y la selección de las nueve finalistas que actúan "ya nos costó muchísimo. El teatro amateur está avanzando. Una obra no se debe minusvalorar por no estar hecha por profesionales". En parecidos términos se expresó Anna Carol, presidenta del jurado. "La línea de separación entre el teatro amateur y el profesional está cada vez más difuminada. Hemos disfrutado mucho viendo las nueve obras, y hemos sufrido mucho al juzgarlas".
Una actuación del grupo Voices precedió el inicio de la entrega de premios. Antes, los presentadores señalaron la ausencia de una persona que cada año está presente en este acto: la concejal Meritxell Lluís. "Hoy no puede estar aquí porque se ha desplazado a Madrid, pendiente de que mañana pueda visitar a su marido en Estremera, por las circunstancias que todos conocemos." Un gran aplauso de la sala siguió a estas palabras.
