El Centre Cultural ha ido afinando en las últimas temporadas su programación, poniendo muy especialmente el acento en las propuestas orientadas a un público familiar. En este caso, el domingo se ofreció la que se ha convertido en una de las primeras propuestas de danza urbana incluidas dentro de su programación oficial, un espectáculo para todos los públicos que nace de un sencillo argumento y que basa en su vestuario y en las luces parte de su espectacularidad.
Cambio climático
Dos robots y dos androides son los grandes protagonistas de una historia que transcurre en un planeta Tierra que se ha quedado a oscuras debido al cambio climático. Juntos viajan al pasado para explicarle esta circunstancia a un humano.
La idea es buena pero su resolución no lo es tanto. El montaje, si bien llama la atención por la interacción entre las luces y la música (firmada por Kapi y Jean Philippe Barrios), no aplaca del todo la sed de danza y de coreografías espectaculares de una parte del público, e inevitablemente incluye más técnica "popping" (esa modalidad que imita el movimiento de los robots) que cualquier otra forma de danza (por lo que deviene monótono a ratos.)
En cualquier caso, el espectáculo de Brodas Bros sí contiene elementos que lo convierten en un montaje en ocasiones dinámico, como el hecho de que los robots y androides se paseen entre el público o interactúen con él encima del escenario. Incluso, una vez finalizado el espectáculo, ofrecen la oportunidad de llevarse como recuerdo una foto con los robots y androides, una invitación que aceptó buena parte del público del auditorio.
Una vez más, el Centre Cultural registró un lleno casi completo, gracias en parte a la combinación entre entradas a un precio asequible y un espectáculo apto para un amplio abanico de público, de 0 a 90 años.
BORDAS BROS