Hubo testigos que vieron a la policía allí, en la esquina de la calle del Nord con la de Sant Valentí, a las nueve de la noche. Más de tres horas después, los agentes seguían allí. El operativo se tornó más complejo de lo que se antojaba en un caso recurrente: una ocupación ilegal de vivienda. Resultó que uno de los sospechosos huyó por tejados y patios y acabó detenido por resistencia. También por daños.
Alguien dio la voz de alerta a las 9.20 de la noche. Un grupo de individuos había irrumpido en un edificio deshabitado de la calle de Sant Valentí, en el Centre, con la presumible intención de ocuparlo para convertirlo en morada, se supone.
Llegaron unidades de la Policía Municipal. Los vecinos observaron varias dotaciones de agentes que se dirigieron a la vivienda supuestamente allanada. En efecto, había intrusos allí. Cinco personas. Y había un par de accesos forzados.
La Policía Municipal identificó a los presentes. No a todos. Parece que el amago de huir fue de varios, pero uno sí escapó en una huida accidentada y larga, por un terrado, por otro, por patios, por tejados.
Los guardias trataron de cerrarle el paso y solicitaron refuerzos. Los indicios de la ocupación intentada se revelaban evidentes: a las señales de forzamiento se unía la manipulación de un contador de electricidad, según fuentes policiales.
Daños
Pasaron los minutos. Un vecino se había marchado a cenar fuera a las nueve de la noche y vio los coches patrulla parados en la zona. Cuando regresó a casa, más de tres horas después, los agentes permanecían allí. Al final, pillaron al huido. Según ha trascendido, el sujeto se dejó caer desde una altura considerable. Se detectaron tejas rotas. El sospechoso se resistió a la intervención policial. Terminó en los calabozos, detenido por resistencia, desobediencia, daños y el delito relacionado con la entrada en vivienda ajena. Antes de trasladarlo a la Jefatura lo llevaron a Mútua.
En el camino, el detenido mantuvo su tono agresivo, según las mismas fuentes, y causó desperfectos en la mampara de un coche policial. Acabada, ya de madrugada, la actuación con los identificados y el detenido, los guardias cerraron la puerta del inmueble allanado y trataron de contactar con el titular.