Detuvieron al dueño de la furgoneta cuando nadie admitió ser el responsable de aquel trozo de hachís que policías municipales hallaron dentro del vehículo. La droga, con un peso de 84,8 gramos, estaba en la furgoneta, parada el sábado por los agentes en el Centre.
La intervención se desarrolló a las tres de la madrugada en la calle de Sant Isidre. No ha trascendido por qué los agentes interceptaron el vehículo. La cuestión es que lo pararon e identificaron a los cinco ocupantes. Los cachearon y decomisaron a dos de ellos papelinas de cocaína; 0,5 gramos en cada envoltorio. Esa requisa dio lugar a denuncias administrativas, pero el hallazgo que llegó unos minutos después terminó en detención. Los policías registraron el coche y encontraron el hachís: 84,8 gramos de hachís en una sola pieza.
No se supo, al menos en aquellos momentos, de quién era la sustancia, por lo que los guardias detuvieron al propietario de la furgoneta, acusado de un delito contra la salud pública, de tráfico de drogas.