La sala de los contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) ha desestimado el recurso de apelación presentado por el Ayuntamiento de Terrassa contra la sentencia de 3 de noviembre de 2014, cuando la Justicia no atendió su reclamación de que la Agència Catalana de l’Aigua hiciera frente a los trabajos de mantenimiento de la Riera del Palau y de retirada de árboles y vegetación de la riera de Les Arenes. El fallo le da la razón a la ACA en su argumentación de que no es competente en los cauces públicos situados en trama urbana, espacios que correspondería mantener "a la administración competente en materia de ordenación del territorio", es decir el Ayuntamiento.
La sentencia supone un paso más en la confirmación judicial de que la ACA ha traspasado a los municipios la gestión de sus rieras. En el presente proceso, el TSJC estima el recurso de la Agència Catalana de l’Aigua y desestima el del Ayuntamiento de Terrassa. A la administración local le dice, además, que el informe presentado sobre el estado de las rieras es "incompleto" e "inconcluyente", motivo por el cual lo desestima como prueba.
En paralelo, la sentencia desestima el contencioso interpuesto por el Ayuntamiento contra una resolución de la ACA de abril de 2013 en la que esta negaba tener competencias sobre el mantenimiento de las rieras urbanas. La sentencia da por válido ese pronunciamiento de la administración hidráulica y acaba con la pretensión municipal de que ésta corra con el cien por cien de los gastos de la limpieza y mantenimiento de los kilómetros de rieras que tiene la ciudad, como había hecho hasta el ejercicio 2012.
Mientras el pleito municipal con la ACA sigue su curso en los tribunales -ante la sentencia cabe recurso de casación-, ambas administraciones reabrieron la vía de la negociación en 2016 y este año podrían cerrar un acuerdo que permita ejecutar las actuaciones urgentes en los tramos con riesgo de inundación.
Propuesta técnica
En este momento, el Ayuntamiento trabaja en la elaboración de una propuesta técnica que pondrá sobre la mesa de negociación con la ACA y que podría concretarse en un plan de actuación plurianual. El acuerdo incluirá un pacto de financiación en el que se detallará la aportación económica de cada administración.
En verano de 2014 la administración local se negó a solicitar subvención a la Agencia Catalana de l’Aigua, al considerar que ésta era compete y debía financiar el mantenimiento de las rieras. En 2016, varias sentencias en contra después, solicitó subvención, pero en ese caso le fue denegada. Ahora, con la vía de diálogo abierta, ambas administraciones exploran un acuerdo político al margen de los tribunales.