La aparición de las nuevas tecnologías ha cambiado nuestras vidas hacia puntos que nos parecían más que remotos hace unos años. Ahora se tiene acceso a casi todo a través de la red y comprar o vender un objeto sin uso o que sobra en casa es práctica habitual. Pero no sólo es terreno de objetos que ya no nos interesan o que han quedado en el olvido. Vender o comprar artículos inmaculados, que no han pasado por el proceso de desembalaje, también es moda. Es decir, vender regalos que no han satisfecho nuestras expectativas. También se va entreviendo la moda de subastarlos por internet. Los regalos de la época navideña son proclives a acabar en una de ellas.
Crece el regifting, concepto que representa el hecho de vender regalos que no deseábamos. Un 15 por ciento, si lo comparamos con el año anterior. Según un estudio de una compañía de compraventa a través de internet, de nombre Vibbo, 4 de cada 10 personas recibe algún regalo no deseado. Y por estas fechas navideñas, debido a un presumible aumento del volumen de los regalos recibidos, las posibilidades de que sean objetos que no se adapten a nuestros gustos o necesidades, son más reales.
Son regalos que el receptor considera que no necesita o que no van a utilizar, aunque, en ese estudio, un pequeño porcentaje, un 5 por ciento, admite que prefiere el dinero al artículo en cuestión. La inmediatez que otorga una plataforma que se dedica a gestionar compras y ventas de segunda mano, ha colaborado decisivamente en este hecho. Sacar partido de un regalo no deseado, es mucho más fácil en la actualidad que hace unos años.
En esta encuesta, también queda claro el tipo de regalo que menos gusta. Acertar regalando ropa no siempre es sencillo. Un 60 por ciento reconoce que los regalos que han recibido relacionados con la ropa no acostumbran a ser de su agrado. Por otra parte, los complementos de moda tampoco acostumbran a acertarse, como consideran un 30 por ciento de los preguntados, mientras que un 20 por ciento, apuntan a los objetos de decoración como otro de los regalos con más opciones de fracasar.
Artículos deseados
Los artículos que menos se acostumbran a rechazar y, por lo tanto, no son carne de una posterior venta, son objetos como los relacionados con las videoconsolas, la fotografía y otros de carácter más técnico. En este caso, el que regala este tipo de artículos tiene posibilidades más factibles para agradar a un receptor del que ya sabe positivamente que es un aficionado a l tema en cuestión.
Uno de los regalos en los que el fallo puede ser más evidente es en lo que se llama el amigo invisible, cuya fórmula corriente consiste en un sorteo anónimo y un regalo a la persona que la fortuna ha designado. Tampoco tienen fama de acertar los amigos y los cuñados, según esta estadística. En cambio, los hijos y los primos se sitúan en lo alto de la lista de personas o familiares con buena fama a la hora de regalar un objeto deseado o que será funcional para el receptor.
Ahora, el resguardo de compra ya no es un documento tan imprescindible como antes y, para los que acaban optando por sacar otro provecho, no supone un impedimento no tenerlo. No obstante, un 56 por ciento de los encuestados afirma que recibe el tiquete por si opta por cambiarlo (lo que ahora se denomina como tiquete regalo), lo que facilita el asunto, aunque un 16 por ciento señala que prefiere venderlo por internet, aunque tenga el resguardo en sus manos.
Un abanico de opciones
La moda de subastar estos regalos, también se va incrementando. Internet ha abierto un abanico de posibilidades infinitas y la compra o la venta de objetos se puede realizar de forma tradicional, o también pujando desde una cantidad inicial. Según un portal dedicado a las subastas por la red, Catawiki, en enero de 2017 el número de personas registradas en su página para vender aumentó en un 63 por ciento.
Presumiblemente, los usuarios nuevos ya planificaban la forma de gestionar sus regalos, previniendo la posibilidad de recibir alguno de no deseado. Hay objetos más preciados en las subastas por internet, como pueden ser los relacionados con la joyería o los más buscados por los coleccionistas. Son más asequibles, a la hora de venderlos, y la puja puede reportar más beneficios de los que se esperban.
Catawiki subasta cada semana más de 50.000 artículos, correspondientes a más de 80 categorías diferentes. Los objetos van desde juguetes, cromos, cómics, antigüedades, ropa, relojes, e incluso hasta coches. Quedarse ese regalo que no apetece y al que no daremos utilidad, ya no es una obligación. Fórmulas para poder desembarazarse de ellos existen, y muchas.