Los profesionales de la salud alertan de que la llegada de la gripe vuelve a saturar los servicios de urgencias, un problema cíclico y sistémico que condena cada invierno a muchos pacientes a esperar horas en los pasillos de las urgencias y días en el box por falta de camas.
Estos días el comité de empresa de Mútua ha hecho público un comunicado suscrito por los seis sindicatos que lo integran en el que denuncia el "colapso casi permanente durante todo el año" que padece el servicio de urgencias del hospital universitario, una situación que "está afectando a la seguridad, la intimidad y la confidencialidad de los pacientes". También, manifiestan, a "la responsabilidad y las condiciones laborales y personales" de los trabajadores.
Largas esperas
Desde hace semanas la actividad en las urgencias hospitalarias se ha disparado y los pacientes esperan horas a ser atendidos. En el Hospital de Terrassa el equipo de urgencias atiende esta semana una media de 250 adultos diarios, frente a los 180 de un día normal. La mayoría de ellos, entre 120 y 140, son pacientes de medicina interna, muchos con gripe o cuadros víricos.
"Los niveles 1, 2 y 3 se atienden con mayor agilidad -explica Antonia Villalba, directora de enfermería del Consorci Sanitari de Terrassa-. Para los niveles 4 y 5 los tiempos de espera están entre las 3 y las 5 horas".
En pediatría, en el Hospital de Terrassa se están atendiendo hasta 140 niños diarios los fines de semana, cuando cierran los centros de atención primaria.
En Mútua la situación es similar. El servicio de urgencias ha atendido durante el fin de semana de Navidad una media de 425 pacientes diarios, algo superior a la del año pasado por esas fechas. El 34% de la demanda se sitúa en los niveles 1, 2 y 3 de prioridad, la media de los hospitales catalanes.
El hospital vivió en el puente del 6 y el 8 de diciembre una punta de demanda de urgencias que volvió a repetirse en Navidad, explica la doctora Gemma Muñoz, responsable del servicio de urgencias de Mútua. "Ahora, coincidiendo con Fin de Año, la llegada de pacientes ha vuelto a dispararse y atendemos más casos de gripe". Como en el Hospital de Terrassa, se trata mayoritariamente de pacientes de edad avanzada con pluripatologías de base y que requieren de un seguimiento intenso.
Mutua informó ayer que desde el 9 de noviembre ha abierto la planta 13 del hospital y se han habilitado camas de la planta sociosanitaria de subagudos. Un dispositivo de refuerzo al que se suman recursos humanos derivados de la asistencia primaria. "Todos los años intentamos reforzar plantilla con nuevas contrataciones, pero en estas fechas no hay disponibilidad de profesionales", explican desde la dirección de Mútua.
Fiebres, vómitos, tos…
En paralelo a los primeros casos de gripe, hace semanas que las urgencias hospitalarias han visto como se disparaban las consultas de pacientes con cuadros inespecíficos. "Ocurre cada año -explica Antonia Villalba-. Son los virus previos a la gripe, pacientes que presentan malestar general, fiebres altas, algunos con vómitos, tos y molestias en el cuello". La enfermera explica que "no es gripe, son virus asociados a los cambios bruscos de temperatura, la contaminación y el ambiente seco y cargado de las semanas previas a la Navidad".
Aunque el episodio no está catalogado como epidemia, la afectación de esos cuadros inespecíficos ha "barrido" literalmente la ciudad y saturado las urgencias desde principios de diciembre.
Ahora, la declaración de la epidemia de gripe dará paso a un periodo de unas cinco semanas de afectación generalizada, con una punta epidémica a las tres semanas de la declaración oficial del brote epidémico.
En este momento, los marcadores de morbilidad muestran que la actividad gripal en Catalunya ha superado el nivel basal y se encuentra a punto de alcanzar el límite epidémico con una notable circulación ya del virus.
Se espera que la gripe entre en fase epidémica en los próximos días o máximo semanas, según las previsiones del Pla de Vigilància de les Infeccions Respiratòries Agudes a Catalunya (PIDIRAC). El avance del brote epidémico en Catalunya está siendo algo más lento que en el resto de la geografía española, donde hace tres semanas que ya se ha superado sobradamente el nivel epidémico.
En la semana 50 del año pasado (entre el 11 y el 17 de diciembre) se registraron en Catalunya 97,6 casos de gripe por cada 100.000 habitantes. Durante las navidades la actividad gripal ha registrado un avance considerable y se espera que en breve se alcancen los 109,4 casos que marcan la declaración oficial de la epidemia.
Por lo que respecta a la población infantil, esta sí ha superado ya el límite epidémico con 169 casos en los pacientes menores de 4 años por cada 100 mil habitantes y de 139 para el grupo de entre 5 y 14 años.