Después del PP, la formación más castigada en las urnas fue ayer Catalunya en Comú. La confluencia ha pagado cara la polarización de la campaña y cae hasta la quinta plaza en la ciudad.
Algo más de once mil electores terrassenses depositaron ayer la papeleta de la confluencia en las urnas, un 9,04 por ciento de los votantes. En estas autonómicas la formación de Xavier Domènech, que llegó a ganar las últimas generales en la ciudad, ha perdido dos mil votos respecto al 27S de 2015, un retroceso significativo teniendo en cuenta que ayer fueron muchas más las personas que acudieron a votar en la ciudad.
Lo mismo le ocurrió a la CUP. Los anticapitalistas han visto como sus apoyos se reducían prácticamente a la mitad en Terrassa, donde han pasado de 8.388 votos en 2015 a 4.762. El partido ha pagado caro el bloqueo del procés perdiendo buena parte de sus seguidores en las urnas.