Una placa figura desde ayer junto a la que recuerda que el Parc dels Catalans se llama así porque allí estaba, años ha, la estación de los ferrocarriles, de los "catalanes". La placa nueva conmemora la "Manifestació de les pedres" que también fue allí; la protesta que el 27 de octubre de 1967, hace cincuenta años, supuso un hito en la lucha contra el régimen de Franco. Vicenta Gallardo, una de las manifestantes, descubrió la inscripción conmemorativa tras un acto institucional.
"Yo estuve", dijo Vicenta, con emoción y con orgullo. Contó que corrió muchas veces delante de los "grises", de la Policía Armada, y que aquella tarde, la del 27 de octubre de 1967, pensó que la manifestación sería un fracaso, hasta que alguien gritó cosignas y empezó la marcha. "Había mucha gente, pero también mucha policía. Tuve conciencia de que no sería algo tranquilo", añadió. Y no, no lo fue. "Los policías nos atacaron en tromba, como si hubieran estado enjaulados". Ella se salvó, pero su hermana y su cuñado fueron detenidos en una farmacia.
Comisiones Obreras había organizado una jornada de protestas en toda España "contra el paro, los expedientes de crisis y por la libertad de militantes obreros presos". Pero apenas hubo altercados en ningún sitio, salvo en Madrid y en Terrassa. En la ciudad-referente, conocida como "Tarrasa la roja", población industrial con una especial efervescencia política y sindical.
A las siete de la tarde de aquel viernes había quinientas personas en el Doré, al final de la Rambla d’Ègara, detrás de una pancarta con alusiones a los "sindicatos libres", a la "libertad" y a la necesidad de eliminar "el salario de 96 pesetas".
La marcha avanzó, pero no más de cien metros. Según los historiadores Manel Márquez, Lourdes Plans y Josep Lluís Lacueva, la Policía Armada cargó con sus porras y los manifestantes se dispersaron. Algunos agarraron piedras de la vía del tren y las arrojaron a los agentes. Estos dispararon. Hubo heridos de bala. Domènec Martínez, miembro del Espai de Memòria, recordó ayer que se registraron dos víctimas por arma de fuego.
Detenidos
Los disturbios prosiguieron y la calma no se restableció hasta las 9.30 de la noche. Se desencadenaron las redadas. Hubo 65 personas detenidas. Un informe posterior fijó la cifra de arrestados en veintinueve, tres de ellos curas. Los detenidos pasaron 72 horas incomunicados en la Jefatura de Via Laietana y luego ingresaron en prisión. Los tres sacerdotes fueron recluidos en establecimientos religiosos.
Domènec Martínez rindió homenaje a quienes en aquella época se implicaron en una lucha muy difícil. El historiador Manel Márquez llamó a los presentes "a recuperar nuestro pasado" y Enrique Rodríguez, secretario general de CCOO en el Vallès Occidental, manifestó su respeto "al compromiso y el valor" de quienes lucharon entonces en tan duras condiciones. La concejal Rosa Maria Ribera homenajeó a aquellas "personas valientes".
