Segundo varapalo en apenas cuatro días. Los grupos de la oposición rechazaron elevar al pleno el proyecto de ordenanzas fiscales para 2018 elaborado por el equipo de gobierno (PSC-PDeCAT). Este mismo lunes impidieron ni siquiera debatir el texto al revocar la urgencia con la que lo había presentado el gobierno. El jueves, todos los partidos votaron en contra de debatir en el pleno del martes las ordenanzas fiscales, excepto el PP, que se abstuvo, lo que impedirá elevar el dictamen como expediente administrativo. El Ejecutivo local, sin embargo, no pierde la esperanza de encontrar un aliado de aquí al martes y ha incluido la actualización de los tributos en el orden del día como propuesta de resolución.
Es la primera vez en la historia del Ayuntamiento, al menos en su etapa democrática, que el equipo de gobierno se ve obligado a llevar al pleno la revisión de las ordenanzas fiscales como propuesta de resolución, en lugar de hacerlo como expediente administrativo. Y lo hace por no haber recabado apoyos en la fase de negociación; fase que los grupos de la oposición denuncian que apenas ha existido.
El teniente de alcalde de Servicios Generales y Gobierno Abierto, Alfredo Vega, se reunió en las horas previas a la comisión con representantes de TeC, ERC y C’s para buscar complicidades. Comunes y republicanos le reiteraron que no iban a negociar y que pensaban votar en contra. Para Xavier Matilla, líder de TeC, es "ridículo que Alfedo Vega intente hacer en cuatro días lo que no ha hecho en dos años". Matilla se refiere a los "incumplimientos" del gobierno a la hora de desarrollar proyectos pactados con TeC que sirvieron para que su grupo facilitase la aprobación de los tributos y los presupuestos en ejercicios anteriores.
Isaac Albert, de ERC, tampoco cree que se den las condiciones para negociar. La postura de su grupo en contra de la propuesta del gobierno ya "está clara y muy decidida". El edil, además, le pidió a Vega que prorrogase las ordenanzas fiscales "y no entrase a negociar con C’s". El líder de ERC, que junto a TeC y CUP negoció los tributos vigentes, considera que la visión de C’s implicaría "modificar sustancialmente la tendencia de las ordenanzas", que califica de progresista.
El portavoz del partido naranja, Javier González, admite que se vio con Vega durante tres cuartos de hora, pero que apenas entraron en detalles de una posible negociación. "Somos el único partido que ha mostrado predisposición al diálogo, pero nos da la sensación de que el equipo de gobierno no quiere llegar a acuerdos. Durante nuestra reunión, Alfredo Vega no hizo ningún esfuerzo por aproximar posturas", relata. El edil explica que su propuesta es la de la congelación de impuestos y tasas, aunque, como máximo, estaría dispuesto a una subida por debajo del IPC, que en el caso de Catalunya está en el 2,1% en el interanual de septiembre. Pero el requisito que dificulta más la negociación es el de "ligar ordenanzas fiscales con presupuestos", con compromisos claros de inversión para 2018.
Hacia la prórroga
Alfredo Vega asegura que "sin presupuestos del Estado ni de la Generalitat, no puedo aventurarme a garantizar determinados gastos". El concejal socialista no pierde la esperanza de alcanzar algún tipo de acuerdo con alguno de estos tres grupos. Necesita, como mínimo, la abstención de alguno de ellos. "Voy a agotar todos los plazos porque creo que son unas ordenanzas buenas para la ciudad", afirma.
De no conseguir el visto bueno (del todo improbable) u abstención de ERC, TeC o C’s, Vega retirará la moción, por lo que los tributos quedarían automáticamente prorrogados el 1 de enero ya que no hay tiempo para seguir explorando el acuerdo. De esta forma, no habrá incrementos en la presión fiscal, excepto en el IBI ya que la subida del 5% para 2018 se aprobó en mayo. Los umbrales máximos, como el del 10% en el IAE, no tendrán continuidad porque fueron aprobados sólo para un año.
