“It”, de Andy Muschietti, adapta libremente un fragmento de la novela de mil páginas del mismo título de Stephen King (publicada en 1986), que en 1990 ya fue objeto de una mini-serie de televisión. Ambientada entre 1988 y 1989, esta versión transcurre en un pueblo de pesadilla en el que la mitad de los niños sufre acoso escolar, malos tratos o abusos sexuales, sin que a ningún adulto le importe un comino lo que está pasando. El terror de los niños se materializa en Pennywise, un monstruo asesino con aspecto de payaso. Antes de estrenarse en ningún sitio del mundo, el film ya había ganado un premio, el de mejor tráiler. Desde luego, el tráiler es mejor que la película porque es (mucho) más corto y da más miedo pero el film tiene cosas buenas como el reparto –casi todos son desconocidos pero están perfectos–, la ambientación, el maquillaje, la fotografía, la atmósfera, los efectos especiales y su facilidad para conectar con el espíritu del cine de los 80, de “Cuenta conmigo” a “Pesadilla en Elm Street”. Si durara media hora menos, podríamos hablar de una cinta muy entretenida pero se alarga tanto que llega un momento en que sólo deseas que se acabe y cuando llega el enfrentamiento final ya casi ni te asustas. No obstante, se puede considerar buenísima si la comparamos con “La torre oscura”, la otra adaptación de King de este verano, o con “Verónica”, la otra exploración de los terrores y traumas adolescentes en clave fantástica que está ahora mismo en cartel. Los intérpretes principales son: Bill Skarsgard, Jaeden Liberher, Jeremy Ray Taylor, Sophia Lillis, Wyatt Oleff, Jack Dylan Grazer, Finn Wolfhard, Chosen Jacobs, Javier Botet. (Cinesa).
“Churchill”, de Jonathan Teplitzky, es un retrato de sir Winston Churchill, que era el Primer Ministro inglés durante la Segunda Guerra Mundial. El film está ambientado precisamente durante los dos días previos al desembarco de Normandía, por lo que se trata más de una cinta histórica que de una biografía propiamente dicha ya que la exposición de la situación histórico-política prima sobre la parte más personal e íntima del personaje y la acción principal abarca sólo dos días. No obstante, destaca sobre todo por el excelente trabajo de Brian Cox, que ofrece todo un recital interpretativo, muy bien secundado por Miranda Richardson y James Purefoy. Otros elementos a señalar son la banda sonora, la fotografía, el ritmo y la elegancia de la puesta en escena. El guion viene firmado por la historiadora Alex Von Tunzelmann, que se hizo famosa en Gran Bretaña por publicar una columna periodística en la que analizaba la falta de rigor en el género del cine histórico. Se da la circunstancia de que este año se ha rodado otra película sobre Churchill, protagonizada por Gary Oldman, que se va a estrenar seguramente a comienzos del año próximo. La anécdota del film es que los puros que finge fumar Brian Cox –Churchill era famoso por aparecer siempre con un cigarro en la mano– en realidad son electrónicos ya que el rodaje se efectuó en Escocia donde las normas antitabaco al parecer son tremendamente estrictas. Intérpretes: Brian Cox, Miranda Richardson, John Slattery, James Purefoy. (Catalunya VOSE y doblada y Cinesa).