El precinto policial seguía ayer cruzado sobre la puerta de entrada. Dos carteles de aviso, uno en el mismo acceso y otro en la persiana del garaje, avisaban ya el mismo martes de la prohibición de entrada: el bloque de pisos, en la calle del Doctor Ferran, en el barrio de Sant Pere Nord, estaba precintado por riesgo de derrumbe. Se había hundido, el martes, a las dos de la tarde, parte de una terraza del primer piso. El Ayuntamiento de Terrassa ha detectado peligrosas deficiencias estructurales.
Cayeron unos veinte metros cuadrados de ese terrado sobre el aparcamiento comunitario. Desde fuera, desde la calle, se podían apreciar los escombros mientras agentes de la Policía Municipal inspeccionaban el inmueble.
Al menos tres dotaciones del cuerpo local se presentaron en la finca, en el tramo comprendido entre la calle del Historiador Cardús y la de Manresa. Técnicos municipales dictaminaron que la estructura principal de todo el edificio, de planta baja más cuatro plantas superiores, estaba afectada por la acción de la aluminosis.
Los habitantes debían abandonarlo. Así lo hicieron los que allí se encontraban, los que oyeron el estruendo y se angustiaron por el desplome. La policía avisó desde la central, por vía telefónica, a los que estaban fuera. La mayoría de los vecinos, de una decena de viviendas, se alojaron en casas de familiares y amigos. Los Servicios Sociales del Ayuntamiento se encargaron de encontrar cobijo para una familia. El Consistorio decidió precintar el edificio "a la espera de una evaluación más exhaustiva".
Para largo
Los carteles, con la leyenda "Peligro. Vivienda precintada. Riesgo de derrumbe", seguían colocados ayer por la tarde donde los puso la policía el martes. Y la situación va para largo, a tenor de la información que ha trascendido.
Parece que los residentes en la finca no podrán regresar a sus hogares en bastante tiempo. El Ayuntamiento, a través del departamento de Urbanismo, ha indicado a este diario que el bloque seguirá clausurado hasta que no se ejecuten actuaciones de reparación profundas previo informe técnico.
Los arquitectos municipales que han inspeccionado el edificio han observado deficiencias de estructura, al parecer motivadas por la aluminosis, "que podrían originar nuevos derrumbes", señalan fuentes del Consistorio egarense.
