Después del robo del 29 de junio, cuando unos delincuentes registraron de noche el Mercat de la Independència durante una hora y media, hubo más asaltos. Sobre todo, en la última semana de julio. Pero el enésimo día, el lunes 31 de julio, la policía pilló a los ladrones dentro del recinto. A dos tipos.
Los Mossos d’Esquadra los llevaron a la comisaría para instruir las diligencias e investigan si los detenidos están implicados en el resto de robos perpetrados en el popular mercado del Centre.
Un vigilante
Poco ha trascendido sobre ese último acto de latrocinio y sobre la actuación policial. Se sabe que un vigilante de seguridad sorprendió a los asaltantes a eso de las tres de la madrugada y que dio aviso a la policía, y que agentes municipales y de los mossos acudieron al Mercat y apresaron a los sospechosos. Las indagaciones de la policía autonómica concluirán si se les atribuye únicamente el robo que no pudieron consumar el 31 de julio o si están detrás también de la retahíla de hechos delictivos cometidos en el mismo escenario este verano.
De momento, el Ayuntamiento, gestor del mercado, ha reforzado las medidas de seguridad en los accesos al recinto, y ha puesto un vigilante nocturno. El que el 31 de julio cazó a los dos sospechosos.
